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aventura entre maduritos

Relato enviado por : omargo el 23/09/2011. Lecturas: 8801

etiquetas relato aventura entre maduritos   Maduros .
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Resumen
eran consuegros y llegaron a ser muuuuy amigos


Relato
Mi nombre es Alfredo, en la actualidad tengo 49 años, estoy casado hace ya tiempo y tengo una pequeña empresa de mantenimiento de edificios, juntamente con mi hijo Roberto de 25 años, casado con Delia de 22 años y padre de dos hijos; Delia es hija de Isabel que tiene 42 años y de acuerdo a mi parecer se encuentra en muy buen estado de salud, ya que tiene unas hermosas curvas que más de una vez llaman la atención por su exuberancia.- Isabel tiene unas tetas que calculo son de talle 105, unas hermosas piernas y un culo bien redondo y respingón y le gusta mostrar sus bellezas, ya que generalmente viste con ropa muy ajustada, incluyendo sus minifaldas que dejan ver por completo sus piernas y cuando se sienta, muchas veces se le puede ver su ropa interior.-
Con Isabel nos conocemos hace muchos años, ya que fuimos vecinos desde jóvenes y más de una vez la invité a salir tanto de solteros los dos, como estando casados y siempre me evitó no de mal manera, sino que siempre puso una excusa muy atendible; no obstante yo no cejaba en mi empeño y cada vez que podía la invitaba a tomar algo, aunque ya contaba con su negativa; pero bien dicen que el que la sigue la consigue y así fue como una vez nos encontramos nuevamente en casa de Roberto y ahí me enteré que salían todos a festejar el cumpleaños de uno de nuestros nietos; su marido no había sido porque se encontraba un poco engripado y entonces salimos los cuatro grandes y los dos pequeños a cenar a un restaurant; la cena fue muy animada pero con la charla se hizo demasiado tarde; Roberto debía llevar a sus pequeños a dormir y quedaba únicamente sin medio de movilidad Isabel, así que gentilmente me ofrecí a llevarla en mi coche hasta su casa; ella al principio se negó amablemente para evitar problemas, pero ante nuestra insistencia y tratándose de una noche completamente destemplada y con una pequeña lluvia, terminó aceptando y se subió a mi coche para iniciar la marcha; al subir al coche como tenía una minifalda, le pude ver bien sus piernas que me parecieron hermosas enfundadas en unas medias de seda de color negro; le dije que se pusiera cómoda y ella no se hizo rogar; como su casa era relativamente cerca, le pregunté si le gustaría dar una vuelta con el coche para de ese modo poder conversar un poco acerca de nuestros hijos y tambien de nosotros: ella con una sonrisa me dijo que la vuelta no tenía que ser muy amplia porque debía volver a su casa para atender la gripe de su marido; en eso quedamos, hablamos un poco de Roberto y Delia y concordamos que ellos tenían un matrimonio muy feliz de acuerdo a las apariencias; le pregunté por su matrimonio y entonces me dijo que por desgracia hacía ya varios meses que algo se había quebrado y ya no era la pareja feliz de antes; le dije que me gustaría conversar acerca de ese asunto, pero entendía que ella ya debía volver a su casa; que si ella no tenía inconvenientes podríamos encontrarnos un día para tomar algo y quizá para poder echarnos unos buenos polvos; ella rió mucho por mi franqueza y me dijo que lo de conversar se podría dar casi seguro, pero de lo otro habría que primero hablarlo seriamente; ahora me reí yo, y quedamos en que nos comunicaríamos a la brevedad para ir a tomar algo juntos; la dejé en la casa, al bajar del coche me dio un beso en los labios y quedamos en que nos hablaríamos para encontrarnos.-
Pasaron unos pocos días e Isabel me llamó para ver si aun mantenía mi invitación; al recibir mi afirmación, me dijo que la pasara a buscar a las 15 horas por su casa, recordándome que era solo para hablar y que de lo otro se trataría parte de nuestra conversación; yo quedé ilusionado porque Isabel no había olvidado lo de echar unos buenos polvos y lo había mencionado, señal que ella tambien estaba pensando en lo mismo.-
Pasé a buscarla, ella ya estaba en la puerta esperando y la verdad que estaba fatal; una minifalda que rajaba la tierra, una blusa bien escotada mostrando sus hermosos pecho y todo eso realzado con unas sandalias de taco bien alto; más que una abuela de dos nietos, parecía una vedette madurita, desparramando belleza y lujuria; subió al coche y me dio nuevamente un beso en los labios que yo retribuí del mismo modo; le pregunté donde quería ir y me recordé que debíamos ir a charlar; entonces me dirigí a una confitería muy discreta que yo conocía y cuando llegamos sonrió y me dijo que le gustaba el lugar; por ser temprano había muy poca gente, pero el ambiente estaba muy oscuro debido a las cortinas que tenía el local, que además dejaba oir música que algunas parejas aprovechaban para bailar; fuimos para un rincón y entonces le pregunté por el tema que había quedado pendiente la otra noche; me dijo que creía que su marido estaba saliendo con una señorita de 20 años, que le estaba volando la cabeza y se puso a llorar; yo la agarré de las manos y la empecé a acariciar con mucha ternura; ella apoyó su cabecita en mi pecho y así quedamos un rato hasta que se oyó la música de un bolero y yo le pregunté a Isabel si le gustaría bailar esta pieza conmigo; ella muy satisfecha dijo que si y de ese modo comenzamos a bailar; aprovechando el ritmo sensual la tomé en mis brazos y la apreté bien contra mi, haciéndole apoyar sus tetonas en mi pecho; ella se quedó abrazada con lo que yo bajé la mano y le empecé a acariciar el culo mientras la apretaba bien contra mi, haciéndole notar ahora mi pija bien parada que se apoyaba en su hermoso cuerpo.- Bailamos varias piezas de ese modo hasta que paró la música para un pequeño descanso, por lo que volvimos a nuestra mesa, llevándola yo abrazada de la cintura; pedimos un nuevo trago y entonces rompí el silencio diciendo que ella había dicho que el segundo tema había que charlarlo un rato, pero que dadas las circunstancia como se venían presentando me parecía que ya no hacían falta las palabras, que solamente debíamos ir hasta un hotel y darnos mutua satisfacción, echándonos unos buenos polvos.- Ella se rió de mi desenfado y me dijo que ella sabía que asi iba a terminar la tarde, pero que no se imaginaba que yo fuera tan directo para decir las cosas.-
Ya de acuerdo los dos, con mi querida y deseada consuegra salimos de la confitería, y en mi auto nos fuimos bastante lejos buscando un hotel de categoría como se merecía Isabel.-Cuando lo encontramos bajamos del auto en un lugar reservado y personal del hotel lo llevó al estacionamiento, mientras nosotros, rodeados de gran privacidad, éramos acompañados hasta la pieza que se nos había asignado.-
Encontramos en la pieza dos copas y una botella de champan bien frío, el que empezamos a degustar antes que nada; a medida que íbamos tomando, Isabel se iba deshinibiendo y sin decirle nada, ella empezó a sacarse la ropa; lo primero que se sacó fue su minifalda que enseguida voló, dejando ver una hermosa tanguita que apenas le tapaba la concha mientras que por atrás era solamente un hilo dental que se introducía en su raya dejando todo el culo al aire; yo despaciosamente tambien me iba desnudando; ella se sacó la blusa y quedó arriba solamente con corpiño, el cual hacía juego con su tanguita; en ese momento me dijo si no la ayuda a quitarle las medias; mi pijas ya estaba completamente dura como un fierro; me saqué los calzoncillos y me dispuse a sacarle las medias; ¡que trabajo hermoso¡ cuando se las terminé de sacar, seguí con mi trabajo y primero le quite la tanga y luego el corpiño dejándola completamente desnuda a mi deseada consuegra.-
La hice sentar en un sillón que había en la pieza, ella se sentó y con el champan que quedaba en la botella lo empecé a volcar sobre sus tetas; eché un poquito y lo fui chupando directamente de sus tetas; la hice recostar en el mismo sillón y con lo poco que ya quedaba lo usé para tirarlo en su concha; Isabel se estremeció por el frío de la bebida, pero enseguida se volvió a estremecer cuando sintió mi lengua acariciando su concha y tomando el champan que de ella salía.-
Estas acciones mías la pusieron en extremo excitada, sus pezones parecían dos arietes largos y duros, lo que fui chupando mientras ella gozaba como una jovencita caliente; le chupaba un poco las tetas y otro poco la concha, hasta que ella en el colmo de la excitación, pego un grito y tuvo su primer orgasmo del día, agradeciéndome haberla hecho acabar porque hacía varios meses que no lo lograba por la desatención de su marido.-
Quedó un rato desmadejada sobre la cama, pero cuando recuperó toda su lucidez, me agarró la pija y la empezó a chupar haciéndome una mamada riquísima; yo antes de acabar le dije que me gustaría cogerla bien cogida; ella entonces me soltó la pija y se recostó en la cama abriéndose de piernas para que yo viera sus labios vaginales ya hinchados por la excitación; me tiré encima de ella y sin miramientos le clave mi pija en su concha, que entró tranquilamente hasta el fondo, provocándole un suspiro de placer; cuando vió con que ganas me movía yo dentro de ella, me avisó que ella tomaba la píldora anticonceptiva, dándome con ello lugar a acabar dentro de ella sin ningún problema.- No me hice repetir lo que me había dicho u enseguida acabé en su concha, la que llené con mi leche; cuando saqué mi pija, hilos de leche brotaban de su concha llenando sus hermosas piernas con mi líquido blanquecino y viscoso.-
Descansamos nuevamente un rato y entonces le dije que me gustaría darle por el culo; ella sonrió diciendo que eso se lo esperaba por las ganas que yo le miraba en culo; me pidió que fuera suave porque no lo había practicado muchas veces y además hacía mucho tiempo de la última vez; yo le prometí ser muy cuidadoso y entonces Isabel se puso en posición para ser culeada.- Yo me coloqué detrás de ella y al principio ubiqué mi pija en la entrada de su ojete y con ella intentaba meterla, pero era muy difícil porque su orto estaba muy cerrado; entonces recurrí a un gel que había traído con el cual unté bien su ojete y con un dedo bien untado de gel lo metí en su culo para lubricarlo por dentro; de esa forma probé nuevamente y despaciosamente mi pija comenzó a entrar en ese agujero tan deseado mientras Isabel no podía ocultar un gesto de dolor que lucía en su cara.-
Cuando se la metí toda, me quedé quieto esperando que su culo se acostumbre a tener un intruso; al poco ella empezó a moverse logrando que mi pija entrara y saliera de tan hermoso culo hasta que agarró un ritmo alocado; en ese momento empecé a moverme yo, acabando enseguida y llenado ahora su culo de leche; dejé mi pija un momento dentro de su culo, disfrutando de tan hermoso momento y cuando la saqué parecía que hubiera descorchado una botella de champán¸ cuando se la saqué, tambien de su culo, al igual que de su concha, se escurría mi leche llenándole las piernas, lo que dio ocasión para que fuéramos a bañarnos los dos juntos, toqueteándonos y jugando como dos jovencitos.-
Nos bañamos, nos secamos y desnudos como estábamos, nos fuimos a sentar a la cama para charlar acerca de lo que había pasado y de lo que pasaría en el futuro; quedamos que lo pasado había sido hermoso para los dos y que en el futuro yo podría visitarla en la casa aprovechando los días que el marido según decía viajaba al interior por razones de trabajo¸ quedamos en eso y entonces cada vez que el marido decía que debía viajar Isabel me llamaba, nos encontrábamos en su casa don de cogíamos como dos jovencitos enamorados.- Pasaron varias semanas de esta forma y una vez hablando de todo y de nada, Isabel me comenta que Roberto mi hijo, la había invitado a coger.- Le pregunté como fue eso y ella me dijo que Roberto había hablado con ella y le había dicho que estaba muy caliente con ella y que le gustaría cogerla; que ella no lo tomó a mal porque Roberto se había expresado con mucha educación; que lamentablemente tuvo que decirle que no porque no quería hacer cornuda a su hija; pero que le tenía muchas ganas por todo lo que le había contado su hija Delia acerca de cómo Roberto la cogía, su tamaño de pija y algunas otras cosas; que4 esa vez se había negado pero que no sabía que podía pasar en un futuro.-
Ese asunto quedó olvidado, seguimos cogiendo cada vez que me llamaba hasta que una vez me llamó y me dijo que me esperaba, pero que esta vez tenía una sorpresa para mi; intrigado fui hasta su casa dispuesto como siempre, pero al llegar me presenta a su amiga Leonor, una rubia de su misma edad y como Isabel, con muy buenas curvas; al presentarnos, Leonor me pregunta si yo era el hombre que hacía tan feliz a su amiga y le respondo que sí; entonces me dice si sería capaz de hacerla feliz a ella.-
Viendo como venía el asunto comienza el siguiente diálogo:
• Podemos ser felices los tres, pero para eso necesitaría una ayudita y seríamos felices los cuatro, que te parece Isabel?
• Es la ayudita que yo estoy pensando?
• Por supuesto que sí, nunca le pedí ayuda para esto, pero creo que para esta ocasión sería la mejor ayuda
• Yo tambien lo creo, llamalo que creo que así vamos a quedar todos contentos
De inmediato llamo a Roberto y le digo que venga a darme una mano, que es muy importante, le doy la dirección, él queda sorprendido pero igual me dice que ya viene a colaborar conmigo y en diez minutos estaba tocando el timbre en el departamento; Isabel le abre la puerta, le da un beso en los labios y entonces yo tomo la palabra y le explico la situación; Roberto por supuesto que acepta mi invitación y entonces quedamos que cada uno atenderá a su pareja al principio por separado; yo nunca había estado con Leonor, así que ella será la primera que yo me coja ese día, mientras que a Roberto le digo si le gustaría cogerse a su suegra Isabel; me contesta que hace rato que le tiene ganas y que dada esta ocasión, por nada del mundo la quiere perder; lo dejo a él que se arregle con Isabel en una pieza, mientras en la otra pieza yo la agarró a Leonor, le meto mano por todos lados y la empiezo a desnudar, encontrándome con una mujer que estaba tan buena o más que Isabel; empezamos a coger como dos desesperados demostrando Leonor que es muy fogosa y que es una adicta a la pija; Isabel ya me había avisado que con Leonor no habría problemas y que podríamos coger sin forro, por lo que yo la monto en cuero sin ninguna prevención; ella empieza a gemir y muy rápido tiene su primer orgasmo; mientras cogemos con Leonor, se oyen los gritos que en la otra pieza está lanzando Isabel mientras es cogida por mi hijo Roberto; en un breve descanso les pregunto a ellos sin quieren cambiar de monta y los dos me dicen que por ser su primera vez se van a sacar las ganas hasta el cansancio, mientras que Leonor me pide que yo la siga cogiendo.-
Fue una tremenda orgía en las dos piezas, yo pude echarme dos polvos que Leonor agradeció porque ella tambien había tenido dos orgasmos y me dijo que hacía mucho tiempo que no acababa dos veces seguidas, mientras que Roberto logró echarle tres polvos a su suegra, la que tambien quedó muy satisfecha, pero le aclaró a Roberto que esa sería la única vez porque no quería que Delia su hija, fuera una cornuda por su culpa.-
Terminada su hermosa cogida, Roberto se fue y yo me quedé solo con esas dos bellezas: el marido de Isabel vendría al otro día y entonces nos pusimos de acuerdo en quedarnos los tres en el departamento completamente desnudos, jugando como tres chicos; yo les tocaba el culo y la concha mientras que ellas me daban manotazos en la pija o me acariciaban los huevos; la verdad que yo ya me había echado dos polvos con Leonor, pero los juegos de las dos me hicieron calentar nuevamente y entre las dos lograron hacerme acabar nuevamente; entre las dos me chupaban la pija para sacarme la poco leche que había salido y así entre risas, besos, abrazos y toqueteos terminó ese día de completa lujuria.-
Yo seguí cogiendo varios meses con esas dos muñecas hasta que el asunto se fue enfriando y cada uno rumbió para distintos lados, mientras que me enteré que Roberto se entendió con Leonor y fueron a coger muchas veces a un hotel, luego de lo cual tambien se fue enfriando lo de ellos.-
Actualmente seguimos con nuestra empresita de mantenimiento y cuando alguna vez nos encontramos con Isabel en la casa de nuestros hijos nos saludamos como dos viejos amigos abuelos de nuestros nietos

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Comentarios enviados para este relato
katebrown (18 de October de 2022 a las 19:18) dice: SEX? GOODGIRLS.CF

pelado45 (1 de May de 2013 a las 22:42) dice: Realmente muy agradable completo en los detalles y sin abundar ni exagerar excelente relato


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