Cita amigable

Para empezar debo decir que tenemos ya cierta edad , los 40 un poco cumplidos .
Hemos tenido tiempo de saber quienes somos , mantenemos una relación entrañable y confiada y no tenemos hijos .
Ella es una señora estupenda no porque lo diga yo sino por las miradas que atrae y es por eso que el amigo y ella se cautivan mutuamente .
Por fin accedí al encuentro íntimo no en secreto sino mediante una relación abierta casual mientras durase su estancia .
Se vino a vivir tres días a casa y los tortolitos se acurrucaban continuamente y no cesaban de darse besos y meterse mano .
Bueno ya está bien , creo que los dos os deseáis y consiento que practiquéis siempre que sea en mi presencia .
Le enseñamos nuestra habitación , amplia , confortable y con abundantes espejos y dos especiales.
Uno en la cabecera de la cama y otro en el techo.
El amigo se iba al día siguiente y deseaba ardientemente tener dicha relación .
Al igual que ella que ardía en ascuas.
Ella me dió las gracias muy efusivas y me dijo que le despertaba más morbo que estuivera yo presente que la propia relación.
Así que aquella tarde al terminar la comida los dos se dispusieron prestos para la relación.
La ducha mano a mano los puso a tono y llegaron al postre.
Yo me senté cerca donde podía observar todo .
Tras un preludio de entremeses donde valía todo y se metían bocados por doquier , llegó el juego supremo donde ahondaron una y otra vez en las profundidades más húmedas de ella .
Para mí la experiencia fue genial . Los dos nos mirábamos con mucho morbo y verla abrazada , penetrada y gimiendo con él fue una sensación que no olvidaré nunca .
Tras un movimiento muy compulsivo el amigo quiso hacerla aún más feliz y lamiendo todo e introduciendo sus dedos en la vulva la consoló hasta el éxtasis y tuvo un orgamo bestial.
Luego la colmó de besos y cabalgando sobre ella tuvo su propia medicina a reventar.
Los dos exhaustos quedaron en la cama mientras yo los miraba principalmente a ella porque era ella la que me había hecho feliz .
Hoy el amigo no viene habitualmente , le han destinado a América pero se portó como un señor y le regaló un collar especial que se lo pone ella adornando su canalillo.
Y sueña con él y con su regreso cuando sea .
Yo la veo como una diosa y nos abrazamos con mucho deseo.