Con mi cuñadita gemela II

Con Mara todo iba muy bien, hemos tenido sexo, en el tren en micros de larga distancia, en las plazas, en los bares, nos tapábamos y nos pegábamos unas masturbadas enormes, pero no podíamos tener sexo complerto porque siempre teníamos miedo de que nos descubran y pasar un papelón mayor.
Alquilamos nuestro primer depto. y no teníamos ni muebles, lo inauguramos cenando una pizza cortada con una escuadra y apoyada en caja, tapa de una máquina de escribir, tomamos una sidra para brindar y nos acostamos sobre las mantas y bolsa de dormir de la carpa, fué hermoso, con el sexo oral ella se tragó por rimera vez mi semen, pero yo no pude hacerla acabar, nunca me enteré el motivo pero no acertaba en el lugar exacto para exitarla lo suficiente, luego la penetraba pero nunca pude aguantar como para que ella acabe y nunca me dijo nada, siempre decía que estaba felíz y que le gustaba, así pasó el tiempo y nuestra vida era de fiesta gastábamos todo lo que ganábamos haciendo viajes cortos o varios días a lugares cercanos, compartíamos salidas con amigos y luego cuando le presenté mi amigo a Marta y se pusieron de novios, hasta compartimos noches en carpa donde con una sábana vertical de separación ambas parejas hacíamos el amor.
Mara era y es una mujer buenísima, fiel, compañera, pero me doy cuenta que nunca encontramos la satisfacción sexual, empecé la facultad, conocí una mujer que no era tan bonita como Mara pero era muy sensual, sabía mis intenciones de ser infiel pero nunca me dejó, luego conocí compañeras de trabajo a las que flirteaba sin pudor hasta que Mara una vez agarró a una con la que había salido a tomar un café y le puso los puntos, pobre flaca no entendía nada, me quería matar suponía que mi pareja sabia que solo era una amiga, en fin pasaron los años, la relación de Marta con su novio era una porquerís, el flaco era macanudo pero muy mamero, era estudiante universitario y aunque estaban juntos hasta la madrugada, la dejaba volver sola en el tren desde el centro a su casa, o la mandaba en taxi, cuande se quedaba en la casa de él la madre la maltrataba bastante y cuando el pibe llegaba tarde o no iba a dormir la increpaba como que lo perjudicaba en su carrera, así las cosas, hasta que cambiamos de departamento a uno más grande donde se quedaban mis cuñados a dormir de vez en cuando.
Tengo que aclarar que se dieron varias situaciones confusas en el trabajo, por ejemplo una vez entro con Mara que llevaba un tapado azul, la dejo en la el ascensor y quedo charlando con un compañero, cuando voy a subir por la escalera me la encuentro bajando con el tapado en la mano, me arrimo y cuando la estoy besando me dice pará que soy MARTA!!!!!!!, nos queríamos morir, pero yo estaba excitado porque me gustaba más su actitud que la de Mara, quien en esa situación me hubiera dado un bife(cachetazo)
Otra vez vengo con yo con Mara y Marta con su novio cada pareja del brazo, para ingresar al subte, ponemos las fichas y dejamos pasar a las chicas primero pero el molinete de Marta se traba y pasan Mara y Jorge, quien no se dió cuenta que su novía había quedado trabada y tampoco Mara asi que Jorge se arrima a Mara y la abraza de atrás, cuando Mara lo mira se sorprende y se da cuenta del error pero Jorge no, así que la quería besar, para esto Marta y yo no podíamos parar ni de reir ni de gritar,para que nos esperen,
menos mal que Jorge se dió cuenta que algo pasaba y se dió vuelta, pobre..... no sabía como pedir disculpas, esto parece mentira pero es real, dense cuenta el parecido, aún más hoy nos seguimos viendo y me cuesta a veces distinguirlas.
Una noche nos encontramos con la pareja de Marta y Jorge y salimos los cuatro, discuten porque el se negaba a acopañarla a la casa, se va y queda Matrta con nosotros, así que nos vamos a casa, esa noche Mara se fue a dormír y me quedé en el comedor charlando con mi cuñada, ahí me contó lo mal que lo pasaba con Jorge y dejó pasar un comentario como que envidiaba a Mara por como la trataba yo, les cuento que eso me puso a dies mil, la abracé, sentí sus senos junto a mi pecho, apoyó la cabeza en mi hombro y me apretó muy fuerte, creí que me moría de excitación, trataba de no ponerme en evidencia poniéndome de costado para que no tuviera contacto con mi erección, pues no saíia como podía reaccionar.

A partir de ese momento empezamos a tener más confianzacon Marta, las hermanas se peleaban mucho y mi mujer era fatal me hacía escándalo por cualquier cosa, me celaba con todo, mis únicos vicios eran ir a jugar al tenis un par de veces por semana a la noche o los sábados y juro que jámás tuve la oportunidad de engañarla.

Como decía empezamos a salir juntos y a mi me empezó a dar vueltas en la cabeza la idea de acostarme con las dos hermanas, le pregunté a Mara si alguna vez habia tenido toqueteos con la hermana y me dijo que si, que alguna vez Marta lo habia iniciado pero nunca llegaron más que a unos toqueteos y besos.

Acompañabamos a Marta hasta su casa pero en el camino nos deteníamos en una plaza a la madrugada y ahi les empezaba a hacer chistes y trataba por todos lo medio de estar en el medio de las dos y entre chuiste y chiste comencé a sobar los senos de mi cuñadita, al mismo tiempo que tocaba los de mi mujer, caminábamos bien abrazados los tres y les manoteaba las tetas a más no poder entre risas y jamás me dijeron nada empecé a darles piquitos a las dos y respondían sin hacer notar nada, en fín, volvíamos a casa y le daba a Mara por todos los agujeros, me encantaba darle analmente, entraba como un guante y ahi nunca se quejó de dolor más que las primeras veces, todavía me intriga porque Mara se quedaba conmigo, si realmente pienso que nunca tuvo un orgasmo.

Marta empezó a quedarse a dormir sola en casa, dormía en un sofá en el comedor, en esos días a Mara le surgieron horas extras y se iba más temprano, así que un día me animé.
Me levanto con Mara, le doy el desayuno en la cama para que no se despierte Marta, espero que se vaya a trabajar y le preparo un desayuno a Marta, me acerco a la cama, me siento y le ofrezco la bandeja, no entendía nada, estaba sorprendida porque nunca en la vida nadie la había atendido así, cuando toma la bandeja me paro y corro las cobijas para sentarme a su lado y me dice -”que hacés? “- nada hace frío, le digo, me hacés un lugarcito?, extrañada me da la bandeja y se corre, me acomodo a su lado todo lo pegado que puedo, le devuelvo la bandeja y le paso el brazo por los hombros, ella tenía una remera de Mara, sin sostén y un pantalón corto, al arrimar las piernas, sentí su calor a través de mi pijama, la abracé con cuidado de no tirar nada y le dije que linda que estás que calentita...
me miró sonrió tomó una galletita un poco de leche y mientras charlábamos de lo mal que la pasaba con la hermana, que la entendía porque sentía que a ella le hacía falta un poco de atención, mientras hablaba como quien no quiere la cosa le acariciaba con la mano que tenía por encima de su hombro el nacimiento lateral de su seno, y veía como poco a poco se levantaba la remerita con su pezón, haste que no pude más y empecé a meterle la mano por debajo de la remera por el costado del camisón para tocarle el pecho, me dice que hacés?, le contesto mirándola fiamente,-” esto no te calienta, no te excita?”, la verdad que si, me responde, a lo que le saco la bandeja del desayuno la pongo en el piso y la empiezo a besar, ella me responde y me empieza a acariciar la espalda, bajo con mis besos, le saco la remera, la destapo, le empiezo a bajar el shorcito, mientras le beso las piernas, ella se entrega mansamente, trata de pararme cuando llego a su vagina, si bien tenía bello lo tenía recortado y prolijo, hasta que la beso y logro introducirle la lengua, ahi se entregó por completo y me empezó a alentar con gemidos, cuando empezó a temblar violentamente crei que era el momento adecuado me subí la besé profundamente en la boca e intenté penetrarla.... ahí se pudrió todo, me aparta de un manotazo y me dice NOOOOOO! Sos igual que Jorge, solo quieren ponerla y acabar ustedes, la verdad me dejó helado pero excitado, le pedí disculpas le rogué que me dejara seguir que me guíe, que mi único interés era darle placer, pero no, se corto el clima y listo, igual estuvo muy bien porque me dijo pobre no te voy a dejar así y me masturbó.
Nos bañamos y fuimos juntos a trabajar en un taxi del barrio, íbamos como novios abrazados y a los besos, le decia te quiero a cada rato, ella no sabía que hacer,, el tachero(taxista) nos miranba sombrados porque siempre con mi kujer íbamos discutiendo y con cara de culo.
Esa noche no nos vimos, temblaba conla idea que le dijera algo a mi amigo o a la hermana.
Igual le pregunté a Mara ¿que pasa que tu hermana esta noche no viene, tiene algun problema?
No, me dijo, se fue a cambiar la ropa del bolso ya no tiene que ponerse y no quiere ponerse mi ropa por las confusiones de la gente, eso me dejó intranquilo porque me pareció que estaba incluido el alerta de la situación vivida pero Mara no se dió por aludida
A los dos días, se vuelve a quedar, y a la mañana siguiente se repite la escena luego que Mara se va a trabajar voy me siento a charlar mientras le doy el desayuno, y le pregunto si le había molestado lo que hice y me dijo que no pero le daba pena engañar a su hermana, pero también le daba pena ver como su hermana no aprovechaba el cariño que tenía para darle, así que terminó el desayuno y nos empezamos a besar, cuando me estaba calentando demasiado me dice ,pero acá no, asi que quedamos en juntarmos en otro lado pero yo estaba con una calentura padre así que me masturbóo de nuevo.

Para eso comencé a contarle a Mara que había una mujer muy cercana que me gustaba y que no le era indiferente, lo que comenzó a alentar una fantasía, extrañamente no me decía nada retomamos los juegos de la plaza con la hermana pero ya alevosamente las besaba a las dos en la boca una a cada lado mío las llevaba abrazadas por los hombros acaricándoles los pezones, llegábamos a la casa donde vivía marta con los padres y mientras Mara saludaba a los viejos yo me quedaba apretando con Marta en el zaguán, con el pretexto de bajar los bolsos del remis, y con la adrenalina de que Mara nos descubriera.
Una Noche no aguanté más y le dije a Mara en plena relación sexual, sabés con quien estoy por tener una aventura, a quien me quiero recoger? No me dice, dale que no vas a saber si nos apretamos juntos en la plaza... y le conté los detalles de nuestros encuentros en casa, no puede ser me dice, si le digo es con tu hermana Marta....
Me pegó un empujón cuando estaba acabando, y me sacó me quería matar, al otro día la encara a la hermana y le dice de todo, justo la hermana se había separado de jorge, en fin fué el final, al poco tiempo tuve una aventura con una amiga que me hizo saber lo que era tener un orgasmo provocado por mi lengua y me alabó la dulzura con la que la traté y luego la penetré y lo hicimos analmente y acabó conmigo adentro y yo acabé con ella y me hizo salir de esa casa con mi autoestima superinflada, dado que siendo casada y separada con una hija, me dijo que era un amante excepcional por la dulzura con que la traté. que nadie la había hecho gozar así, en fin en esos dias Mara se había ido de vacaciones sola y al regreso me contó que se había encontrado en la provincia donde estaba de vacaciones con un antiguo novio con el que no había podido debutar, y me contó los entretelones de su reencuentro sexual, como yo le conté el mío con esta amiga que ella conocía, teminamos muy excitados haciendo el amor de forma distinta,, creo que esta vez lo gozamos como amantes,pero ya no podía sentirla como pareja, así que la llevé a la casa de la madre con sus cosas y la dejé, mi vida transcurrío por otra pareja que no anduvo y hoy llevo varios años de casado, con el tema de la falta de atención por parte de mi mujer por el tema rutinario, Con Mara y Con Marta nos encontramos de vez en cuando Mara tiene un novio en el extranjero con el que se ven de vez en cuando, viajó por el mundo recorrió el país de punta a punta sigue cabeza fresca como siempre no tiene nada económicamente hablando,Marta está casada con hijos y con el peso del hastío y del desgaste de la pareja, visiblemente insatisfecha, y yo con la esperanza de volver a encontrarme intimamente y si fuera posible con las dos juntas para terminar lo inconcluso aunque me cueste un bobazo (ataque cardíaco) saludos, perdón por lo largo y si Mara o Marta llegan a saber de esto se dan cuenta de quien soy y quieren teminar lo inconcluso, cuentan conmigo.