De chica ingenua a amante de mis cuñados

Tenia 17 años cuando por casualidad escuche una platica de mi hermana mayor con sus amigas, ella les presumía que había encontrado al hombre perfecto, cuando ellas le preguntaron porque decía eso ella contesto que era el mejor que había tenido en la cama, según ella tenia el pene mas rico que había visto en su vida, todas se rieron y le pedían detalles de su relación y ella se las contaba como si platicara de cualquier cosa. Todas estaban nerviosas y podría decirse que excitadas y yo me quede pensando cosas, para entonces solo tenia novio pero de manera tierna, de sexo no sabia casi nada y esa platica me emociono mucho al grado que empecé a espiarla para ver que hacia con el. Mi cuñado se dio cuenta de mi curiosidad pero el colmo fue una ves que estaba en mi casa y se quedaron solos, yo fingí salir pero lo que hice fue esconderme, podía ver como empezaron a manosearse , después de un buen rato en que se besaron y tocaron a placer llego lo bueno, ella le saco el pene y se lo acomodo en la boca mientras el le sobaba las tetas y ella gemía de lo mas cachondo, yo estaba sorprendida y francamente excitada, podía ver como le metía las manos bajo la falda y le agarraba todo y ella se dejaba pero sin soltar el pene que tenia en la boca, lo miraba y no lo creía, realmente era grande pero sobre todo muy grueso. No entendía como era posible que le cupiera semejante cosa en la boca pero ella no lo soltaba, se notaba que tenia mucha practica en eso porque lo chupaba muy bien y mi cuñado solo murmuraba entrecerrando los ojos “asi sigue asi” por un momento olvide que era mi hermana y solamente veía una pareja caliente al máximo, fue cuando me descuide y sin querer hice un ruidito, mi cuñado volteo a ver y me descubrió pero mi hermana no se dio por enterada, estaba tan metida en lo que hacia que no se entero de mi presencia pero el si, fingió no darse cuenta de mi presencia y siguió en el manoseo pero esta ves lo vi mas intencionado, lo vi reírse y como si actuara para mi levanto la falda de mi hermana como para que viera lo que le hacia, vi sus nalgas con las pantaleta de lado y su mano acariciándolas y tocando la vagina y el ano de ella, se las abría mas como para que viera todo eso y mas me excitaba, quise salirme y correr pero mis piernas no se movían y ahí seguía mirando y el actuando para mi, solo mi hermana no me miraba y ni se imaginaba que me tuviera de publico, ella gemía y se movía como pidiendo algo mas y el la complació, en un momento se la saco de la boca y se la jalo como mostrándomela, la vi fuerte y gruesa y dura y el miraba a mi hermana y me veía a mi que ya no pude disimular que los veía, solo me escondía de mi hermana, de el ya no porque me había descubierto y no tenia caso hacerme la inocente, los veía y me gustaba. En ese momento el la levanto y le quito el brasier para chupar sus pechos y ella se retorcía de placer y por abajo le metía los dedos en la vagina que me imagino ya quería algo mas que eso, la volteo y le acabo de bajar los calzones y ella solita se puso empinada esperando ansiosa que se lo metieran, era seguro que no era la primera ves que lo hacían porque se veía que tenia mucha practica y se conocían muy bien, todavía tubo el descaro de sobárselo y mostrármelo como diciendo, “mira lo que le voy a meter” pude ver como se lo acomodaba y de un golpe se lo metía, ella suspiro cuando lo sintió dentro y se quedo quieta un momento pero casi de inmediato empezó a moverse mientras le decía cuanto lo amaba y le pedía que no se lo sacara, estaba desconocida para mi, nunca la había visto asi y menos pidiendo sexo asi a gritos, la vi como una extraña, alguien desconocida para mi pero no podía evitar verlos y calentarme también yo, el se lucia metiéndolo y sacándolo casi por completo, cada que lo sacaba ella gemía mas y se pegaba como para que no saliera, era increíble ver asi a mi hermana, yo estaba embobada y no hacia nada, solo sentía algo en mi, era un calorcito entre mis piernas que me subía a la cabeza y me mareaba, de pronto ella se movió mas rápido y el también y casi gritaban cuando sintieron el orgasmo, lo supe después pero en ese momento los miraba moverse como desesperados, después de un momento se calmaron y el se dejo caer sobre ella pero nadie dijo nada, solo hubo un momento en que el se volteo a verme sonriendo y satisfecho saco el pene de mi hermana y cuando lo vi fuera estaba escurriendo todavía, de ella salía también esa rica leche que tiempo después me gustaría también, ella se enderezo y agarrando su calzón se limpio la panochita que goteaba semen, se limpio y guardo el calzón en su ropa sucia y se fue al baño. Yo me fui a mi cuarto a tocarme, estaba mojadisima y ahí estuve hasta que oí que se salieron, apenas salieron y corrí al cuarto a ver como estaban esas pantaletas que había dejado y las encontré mojadisimas de semen, las vi y las olí, me daban ganas de probar el semen para ver a que sabia que tanto le gustaba a mi hermana y lo probé, tenia un olor y sabor como a cloro pero no era desagradable.
Pasaron 15 días en que trataba de no ver a mi cuñado hasta que coincidimos en una fiesta, el fingiendo ante los demás me saco a bailar pero mientras bailábamos saco el tema que tanto miedo me daba, “ que te pareció lo que viste la otra ves?” sentí que me ponía roja y solo dije que no sabia de que hablaba, cínicamente sonrió y dijo que no mintiera, que el me vio todo el tiempo y se dio cuenta que me gusto verlos, no supe que decir y me quede callada pero el me insistía en recordarme todo eso y otra ves sentí mojada mi cosita al recordar todo lo que vi en días pasados. “No te de pena, es normal que te guste, de seguro lo haces con tu novio también” “no hago nada de eso y mejor vamos asentarnos” me apretó fuertemente entre sus brazos y pude sentir su pene duro contra mi panochita, fue algo delicioso sentirlo asi y el se dio cuenta, “vamos a sentarnos pero me gustaría verte después para platicar mas de esto te parece?” no supe donde tenia la cabeza pero en ese momento dije que si y con eso firmaba mi sentencia.
No paso ni una semana cuando se dio la oportunidad, se dio o el la busco, el caso es que llego a buscar a mi hermana pero no estaba y mis papas tenian que salir, asi que me pidieron que lo acompañara mientras ella llegaba, (se suponía que se iban a casar y por eso entraba a la casa) apenas salió y el inmediatamente me pregunto que había pensado de lo que me había dicho y lo que había visto. Otra ves me opuse roja de pena pero mi cuerpo sintió la emoción de tocar un tema prohibido, lo único que dije fue que no había pensado nada, no me creyó y volvió a insistir en que no era malo y que si le gustaba a mi hermana era porque era delicioso y por eso mismo vi a mi hermana casi gritar de gusto, antes de que yo dijera algo me tomo de las manos y me soltó una tremenda pregunta ¿Te gustaría verlo y sentirlo? Yo me quede como espantada y el se rio ante mi espanto, ¿no pasa nada, no me digas que nunca has visto uno? Conteste que no y eso lo animo más, bueno pues es tiempo de que lo conozcas, prometo guardar esto como nuestro secreto, ¿de acuerdo? No recuerdo haber respondido algo pero supongo que aplico el dicho de que el que valla otorga, lo digo porque delante de mi se bajo el cierre del pantalón y se lo fue sacando poco a poco, yo estaba sorprendidísima, la forma como se fue dando todo nunca la pensé, cuando vi ya estaba de fuera colgando, enorme para mi gusto, tanto que quede como hipnotizada y no podía despegar la mirada de semejante aparato, el noto mi admiración y se lo sobo para que se fuera parando y cuando estuvo en todo lo largo mas maravillada estaba, era increíble como se veía, y sentía deseos de tocarlo y no se cuantas cosas mas, el se daba cuenta de mi asombro y sonreía divertido mientras yo estaba apenada, agarro mi mano y me la puso en su miembro, “agárrala, siéntela, te va a gustar, es dura pero suavecita” era cierto la toque y estaba tibia y suave, “juégala, hazlo sin pena, nunca voy a contar nada de este momento, va ser cosa de los dos nadamas? No hacia falta que me animara, yo sola estaba embobada contemplando y jugando esa cosa que me tenia asombrada y sentía como se movía como temblando en mis manos, el notaba mis nervios y me fue agachando a modo de que me queda a la altura de la boca, ya cuando estaba ahí solo basto un leve empujoncito para que yo la tuviera en los labios, olía raro, podía ser a orines pero no me desagradaba, mas bien me excitaba ese olor y cuando me di cuenta ya la tenia dentro de la boca, era suave y tibia, ¡que delicia! Me gusto mucho y la besaba y chupaba suavemente como si fuera un rico dulce no pensaba ninguna otra cosa, reaccione hasta que sentí sus manos en mis pechos, las había metido bajo el brasier y me los jugaba dulcemente, no cabía duda de que era un experto en cosas del sexo, sentí mis pezones duros y el los apretaba como retorciéndolos pero no me dolían sino me excitaba mas, nunca me los habían tocado asi, todo eso me ponía mas caliente y mi conchita estaba muy húmeda, la sentía caliente y mis pantaletas estaban húmedas. De pronto se detuvo y me agarro para ponerme de pie y besarme en la boca, para entonces ya estaba perdida, me sentía mareada sin fuerzas y como muñeca a su antojo, me deje llevar por la emoción y no me fijaba ni en el tiempo que pasaba, por suerte mi hermana nunca llego esa tarde. Sentí como al apretarme contra el su pene quedaba entre mis piernas rozándome la vagina y mas deseos sentía, me abrasaba a el y el correspondía con mas besos y tallones en mi cosita, sus manos me apretaban las nalgas y las masajeaban con desesperación, ¡ya era demasiado! Mi cuerpo pedía algo mas y el lo entendió, con toda la facilidad del mundo me desabrocho el pantalón y lo fue bajando sin que yo dijera algo, estaba hipnotizada por lo que sentía que no proteste me recostó en el sillón y me levanto las piernas para sacarlo por completo, cuando me saco los calzones sentí una punzada en el estomago, de pronto me tenia con las piernas levantas y mi cosita quedaba impúdica ante sus ojos, abierta y húmeda, nadie había visto mi parte mas intima asi tan cerca, se recostó sobre mi y puso su pene entre los labios pasándola suavemente. ¿La quieres? ¿Quieres sentirlo dentro? Esas preguntas me parecían una burla, me estaba quemando de deseo y todavía me preguntaba si lo quería, entendió mi silencio y sin mas empezó a meterlo, ¡que delicia, sentí la gloria hasta que se detuvo, había llegado a mi himen y espero un rato, mientras me besaba mas y mas los pechos y la boca, puso su mano en mi concha jugándola y metiendo un dedo como queriendo abrir camino, sentí pena de que sintiera como estaba mojada pero no podía decir nada, estaba disfrutando algo increíble, nuevamente se coloco entre mis piernas y empezó a meterlo con mas firmeza, apenas lo sentí y mi parte soltó un liquido que no sabia que era, creí que me estaba orinando y me dio por llorar, el pregunto que me pasaba pero no supe que decir, ¿te duele, te estoy lastimando? Solo moví la cabeza queriendo decir que no, volvió a preguntarme pero no dije nada, solo lo apreté con mis piernas y volteé la cara para que no viera mi satisfacción al sentirme penetrada por primera ves. El entendí lo que sentía y sin decir nada me agarro con firmeza de las nalgas para apretarme contra el y de un empujón metió la parte que faltaba y que rompía mi himen, fue un dolor agudo pero rápido que me hiso soltar un gritito que el callo con su boca al besarme y hablarme cariñosamente. “tranquila, no pasa nada, en un rato se pasa y solo vas a sentir placer”. Estuvo quieto unos minutos como comprendiendo que era mucho para ser mi primer ves pero después volvió a besarme los pechos mientras empezaba moverse metiendo y sacando eso que tanto me estaba gustando, era increíble como disfrutaba ese momento, me sentía llena y solita me movía sin que el lo pidiera, ¡que rico era sentirme cogida asi, nunca imagine que fuera tan bello! Fueron los minutos mas hermosos de mi vida, de repente empezó a moverse mas rápido y otra ves sentí como algo salía desde dentro de mi como agua hirviendo y el se quedo quito pero haciendo un esfuerzo por aguantar algo que no sabia yo, en un momento se salió tan rápido que solo pude decir, ¡nooooo! Pero era que empezaba venirse y descargaba semen de manera abundante que caía sobre mi estomago y mis piernas, ya no lo metió pero se tallaba contra mis piernas hasta que termino y quedaba quieto sobre de mi. Fue riquísimo, ¡te gusto, lo disfrutaste! Con toda la pena del mundo dije que si, que no sabia que tan rico era eso, “por mi podemos hacerlo cuantas veces quieras, te prometo ser discreto y no hacer nada que te moleste” júramelo por favor, me moriría de pena si mi hermana se entera y quien sabe que pase, “no te preocupes, cuenta conmigo”, te aclaro que me salí antes por no correr riesgo de que fueras a embarazarte, si no sabia eso ahora ya lo sabes, la próxima ves será con condón, ¿de acuerdo?
Era increíble, todo paso en un momento que nunca pensé, vi el reloj y había pasado una hora y mi hermana ni sus luces, me sorprendí yo misma cuando me levante casi desnuda y camine delante de el sin sentir pena o remordimiento, era como si fuéramos una pareja de toda la vida, el estaba ahí con su pene en descanso pero aun asi lo vi enorme y me sorprendía yo misma al pensar que todo eso lo tuve dentro de mi el sonriendo tomo mi calzón y me lo dio riéndose, “de buena gana me lo quedaba de recuerdo pero prefiero tenerte a ti”
Asi fue mi primera ves y fue precisamente con alguien que nunca pensaba pero que me trato tan bien que no me arrepentía, con el viví y aprendí muchas cosas sobre el sexo, con el descubrí muchas formas de hacerlo , puede decirse que hasta me pervirtió en cierto modo, en un rato pase de ser una jovencita tímida en la amante del novio de mi hermana esa situación duro mas o menos medio año en el que tuvimos muchos encuentros mas y me aficione tanto a el que mas parecía yo la novia que mi hermana, todo eso fue hasta que por otras razones se vino abajo la boda con mi hermana y rompieron el compromiso, el me buscaba pero ya no quise seguir con el por pena de que al dejar a mi hermana siguiera yo.
Se que mucha gente me tachara de lo peor pero muchos otros entenderán mi situación porque nunca fue mi intención quitarle el novio a mi hermana solo fue algo que sucedió sin pensarlo y el mantuvo el secreto toda la vida al grado que hasta la fecha nadie conoce esa parte de mi vida. Muchas cosas siguieron después de esa primera experiencia y curiosamente tiempo después pase algo parecido con el que ahora es esposo deme hermana. Eso será para la otra si es que les gusto esta experiencia.