Relato enviado por:
narrador el 27/9/2017.
Lecturas:12260 Etiquetas: Jefes
Relato completo
Cuando entré a la oficina de mi jefa, que es toda una empresaria, viéndome fijamente me dijo. Si quieres que te promuevan tienes dos opciones, una es trabajas como un burro, o simplemente me complaces, que decides.
Yo la verdad eso de trabajar como un burro, nunca me llamó la atención. Por lo que mi respuesta fue. Y en que desea la señora que yo la complazca. Lo cierto es que nada más al ver la manera desafiante, en que se puso de pie frente a mí, como que supe lo que la señora deseaba. Lo cierto es que me sentí, como una puta, pero que iba hacer, decirle que conmigo se había equivocado, para que me botase como bolsa de colostomía. No que va, no estaba dispuesto a perder mi empleo, así que no me quedó de otra, que mostrando una sonrisa someterme a sus caprichos. Mi jefa, tiene por lo menos unos 65 años, y aparte de ser dueña de la empresa, es millonaria. Por lo que cuando ella en un dos por tres se quitó toda su ropa, ofreciéndome sus pálidas nalgas, yo colocándome tras ella. Comencé a acariciarla, para luego, tirarme al piso, y ponerme a comenzar a mamar su depilado coño. Mientras que sin mucha prisa me fui quitando la ropa, rogando que nadie fuera a entrar en la oficina en esos momentos. Ya del todo desnudo, seguí por un buen rato, mamando su coño, mientras que ella chillaba de placer, hasta que de momento me dijo. Métemelo. Pero colocándose sobre mí, debido a mi situación, no me atreví a decirle, que yo prefería estar arriba. Pero no hizo mucha falta, ya que al poco rato cambiamos de posición. Bueno desde ese día fui promovido a Jefe, de mi departamento, aunque sé que en toda la empresa, se refieren a mí como, el chupa coño de ella. Lo que a la hora de la verdad, me importa poco.