Un campamento, dos jovenes calenturientos y un vídeo porno, ¿qué puede salir mal?Estaba en la cama más alta de la litera de la parte de chicas, estaba sola y para matar el tiempo me puse varios vídeos porno de colegialas.
Entro un compañero de mi clase, con el cual coincidí en el campamento.
La verdad, me gusta bastante.
Todos se fueron y él pareció tener la misma idea que yo y vaguear un rato. Lo invité a subir a mi cama para hablar cuando me llegó un mensaje, desbloqueé el móvil y salió la
página porno, él se acomodó a mi lado y dijo: "Yo también iba a ver porno, ¿puedo verlo contigo?"
La idea me tentó. Yo, la chica que estaba enamorada de él, solos en una cama, viendo un vídeo porno... no ocurre todos los días.
Me acomodé y vimos porno durante 30 minutos.
Comenzó a tocarse, los gemidos y esta visión no ayudaban en nada con mi problema, mi coño pedía atención a gritos.
Comencé a desnudarme y a tocarme, me puse encima de él sin pensarlo, le besé y le desnudé. Le masturbé y metió su polla en mi boca hasta correrse.
Me puso debajo de él y me estrujó las tetas, chupó y metió sus dedos en mi coño llevandome hasta lo más alto.
Me dio las manos y las puso a cada lado de mi cabeza.
"No puedo follarte, no quiero follarte" Susurró y me besó. "Te quiero, desde que te vi"
Me fue penetrando lentamente, nos mirábamos, sonreíamos, y nos entregábamos el uno al otro.
Así paso todo el campamento, viendonos a escondidas.