Era sábado por la noche

Era sábado por la noche, mi esposa no tenía nada que hacer, ni adonde ir, su amiga de cuarto andaba de vacaciones y ella allí totalmente aburrida, así que decidió irse temprano a la cama, subió a cuarto, abrió las puertas del balcón para dejar que entrara el viento que ayudaba a mitigar el calor de julio, se desnudó por completo, se fue a la cama y se quedo profundamente dormida…
¿Qué pasa?
Un ruido muy fuerte la despertó como a las 2:00 de la mañana, alguien estaba sobre ella, intentó moverse pero sus manos estaban atadas a la cabecera de la cama,
Ayuda ayuda!!! Desgraciado hijo de puta déjame en paz, maldito estúpido déjame!!!
Ella sabía muy bien que nadie la escuchaba, las paredes de la habitación del hotel eran muy gruesas y ahogaban sus gritos. Por más que intentó ver quien era la persona que le estaba haciendo esto, no lograba distinguir, estaba muy oscuro, de pronto se levanto de encima de ella, se acerco a la ventana, la cerro y encendió la luz, por desgracia, el tipo traía un pasamontañas que le impedía verle el rostro,
Auxilio!!!! Ayuda!!! Volvió a gritar con todas sus fuerzas. Sin ningún resultado.
Por favor no me haga daño, por favor, le daré dinero, lo que quiera, pero por favor no me haga daño!!, le suplicaba ella con lagrimas en los ojos, pero él la ignoro, se paro frente a ella y pudo ver unos enormes ojos grises y por debajo del pasamontañas se lograba escapar un cabello castaño y rizado, su mirada se clavaba directamente en sus senos, ella dejó de gritar y clavó su mirada en el, trataba de intimidarlo y así hacer que huyera pero no lo logró.
El se acerco más hasta llegar a su oído y le dijo con un tono de voz suave, pero fingido,te voy a hacer el amor como nunca nadie te lo ha hecho y quiero advertirte que si haces algún ruido, te quejas o te rehúsas a obedecerme te vas a arrepentir, así que más vale que disfrutes de lo que hoy te voy a hacer porque te aseguro que nadie nunca te volverá a hacer sentir así.
Se quedó paralizada, este tipo podría matarla si lo desobedecía así que guardó silencio,
Solo asintió con la cabeza, no le quedaba otra opción.
Muy bien niña, veo que desnuda te ves mucho mejor que vestida, tus senos son hermosos,
¿Los puedo tocar? Cuidado con tu respuesta nenita ahhhhhhh.
Si tócalos, le dijo ella temerosa,
Empezó a acariciar sus pezones, su mano estaba muy fría, así que los pezones rápido se pusieron erectos, los acariciaba con mucha paciencia, primero la aureola, luego el pezón, los pellizco suavemente, después con su dedo recorrió su vientre, se detuvo largo rato en el ombligo. Acercó sus labios a mis pezones y los empezó a mamar, a jugar con ellos con su lengua, era muy extraño pero me empezaba a sentir algo húmeda, a pesar del miedo que tenia, pero nunca nadie me había tocado así, era extraño lo que sentía. Su lengua empezó a recorrer mi cuerpo dejando a su paso una huella de saliva, llego a mi ombligo y nuevamente empezó a jugar con él, lo besaba, lo chupaba y mi respiración empezó a agitarse, en contra de mi voluntad. Fue deslizando su lengua hasta llegar a la entrada de mi vagina, lamio mis labios, los chupo los saboreo, se detuvo un momento y dijo, ayy princesa estas deliciosa, tu aroma me excita, pero veo que tú no te quedas atrás, puedo sentir en mis labios tu humedad, ayyy linda esta será tu noche de suerte.
Metió un dedo en mi vagina para comprobar mi humedad, ahhh!! qué rica estas chiquita no puedo resistir más. Se levanto de mi y empezó a desnudarse como desesperado tenía un cuerpo entre atlético y delgado su piel era clara y tenía un trasero perfecto sin vellos, ni estrías nada de eso, se veía que se ejercitaba y cuidaba su aspecto, y lo que más me dejo sorprendida fue el tamaño de su pinga, no lo podía creer, cierto que solo había visto un par, pero esa era descomunal, gruesa y larga, no sabía como pretendía el meterme eso en mi chochita, se acerco a mí y me dijo
Te gusta lo que estás viendo verdad? no lo niegues, se que te sorprendí!!
Y ahora vas a saber cómo sabe, vas a sentirte en el cielo cuando mi pinga entre en tu boquita, y la vas a mamar como si fuera un plátano, lo vas a chupar hasta sacarle el juguito y te lo beberás todo escuchaste?
Asentí con la cabeza, pero tenía miedo muy pocas veces me había tragado “eso" es asqueroso, pensé, pero no dije nada, mi vida estaba en juego. Se puso sobre mis pechos, y a medida que veía más de cerca su miembro, parecía más enorme,
Abre la boquita que ahí va tu medicina, a ver di ahhh!!
ahh!! Si chupa, chupa ahhh ahh ahh siiii!
Yo chupe todo lo que pude, aunque no cabía mucho de eso en mi boca, la abrí lo mas que pude y empecé a mamar, me empecé a sentir muy excitada mientras chupada esa pinga gigante, y lo chupaba y chupaba , empezaba a disfrutar de esta violación, mis lagrimas cesaron por completo y se convirtieron en ruidos de saliva combinados con liquido seminal, el no dejaba de gemir de placer me vio a los ojos y me dijo en tono de burla, te dije que te gustaría ehhh y quiero ser reciproco contigo y se llevo uno de sus dedos a mi vagina y mientras yo chupaba y chupaba como desquiciada, el empezaba a frotar mi clítoris , lo que sentía era electrificante y entre mas lo frotaba más me sentía en las nubes, yo chupaba cada vez más rápido y el movía más su dedo hasta meterlo por completo en mi vagina, metía y sacaba al ritmo que yo chupaba y chupaba su pinga, así estuvimos un rato hasta que mis piernas se acalambraron y mi cuerpo se tensó, una corriente cosquilleaba todo mi cuerpo, dios mío!! .. No pude evitarlo y gemí, Si gemí como loca
ahhhh!! si ¡! que delicia ¡! Maldito que me has hecho?!
De pronto sentí un líquido viscoso y caliente en mi boca y los gemidos de él se intensificaron, ahhhh!! Si princesa si sigue así, trágate todo, yo no sabía qué hacer era demasiado el liquido que entraba en mi garganta me empecé a atragantar y a escupir, mi cara se llenó de leche. Que delicia, dijo, mira tú carita toda llena de lechita, deja te limpio. Comenzó a lamer toda mi cara dejándola completamente limpia, cuando termino metió su lengua en mi boca y comenzó a besarme, chupo mi lengua, mis labios, empezó a besar mi cuello, mis pechos, jugueteando con mis pezones que nuevamente estaban erectos, dejo mis pechos y fue directamente a mi clítoris, otra vez empezó a lamerlo y lamerlo, esta vez era más intenso, metía su lengua hasta dentro de mi vulva, luego la sacaba, y lamia todo alrededor, succionaba mi clítoris, ahh!! si, si, si me vengo me vengo!!!! ahhh!!, no pude evitarlo y mi cuerpo estalló en sensaciones que nunca imagine que existieran, mi cuerpo estaba exhausto y el no dejaba de lamerme, para por favor, para. El se detuvo como comprendiendo la sensibilidad en la que estaba mi vagina, al menos eso creí yo.
Ahora sí, princesita, prepárate porque viene lo mejor. Levanto mis piernas hasta sus hombros, apunto su pinga en la entrada de mi vagina y empezó a embestirme como un toro aghh!! ahh!! ahh!!
El placer que me estaba dando contrastaba con la situación en la que estaba, era una violación y con vergüenza admito que la estaba disfrutando.
Siii!! Dame más!! Dame más!! ahhh ahh ahh que delicia!!
Sus embestidas eran cada vez mas fuertes al igual que mis gemidos, el mete y saca era intenso, el grosor de su pinga me daba un placer inmenso y ahh!, ahh!! ahh!! Otra vez me vengo si si siiiii!!!. Gemimos los dos al unisonó, terminamos en un orgasmo espectacular, haciendo que nuestros jugos nos dejaran bañados a ambos.
Yo me sentí por demás adolorida de mis manos, así que con algo de temor le pedí que me desatara. Por favor desátame, te juro que no tratare de huir ni nada de eso, estoy lastimada, por favor,
Si mi princesa, después de este momento te mereces estar algo cómoda. En cuanto me desató lo tomé de la cabeza y comencé a besarlo, como nunca había besado , ahora era yo la que besaba y jugaba con su lengua, sentía en mi boca el sabor de mis jugos que momentos antes él había bebido, lo besaba tan apasionadamente que por un momento perdí la noción del tiempo y del momento e intente quitarle el pasamontañas, el detuvo mis manos y se separó de mi,
Era eso lo que querías verdad, me querías descubrir, y por eso te castigare. Me levanto y me puso boca abajo levanto mis nalgas dejándome sobre las rodillas, No por favor así no, me va a doler, por favor, no fue mi intención quitarte el pasamontañas
shh!! calladita por favor y quietecita, abrió mis nalgas lo más que pudo y comenzó a lamerme el ano, ahh!!!
Solo pude gemir, lo que sentía era inexplicable, mi cuerpo empezaba a debilitarse, pero no quería que se detuviera, su lengua recorría mi ano por dentro y por fuera, yo estaba totalmente fuera de mí, mis gemidos eran intensos. Era notorio que él era un experto en el sexo, me pasaba su lengua desde mi ano hasta mi clítoris pasando por mi vulva y todo lo lamia con gran pasión dejándome hasta sin fuerzas para gemir, se detuvo y sentí como acomodaba su pinga en la entrada de mi vagina, estaba por penetrarme otra vez, ese hombre no tenia fin, jamás se cansaba y su pinga jamás se veía flácida, de un solo golpe metió la pinga en mi vagina, uno de sus dedos estaba dentro de mi ano y otro sobaba mi clítoris, haciéndome vibrar, temblar, gemir, gritar estaba sin control, el placer que me estaba dando era incomparable e inigualable ahhh!!! ahh!! Si, si, Ayy chiquita estas bien apretadita.. ahhh!! ahhh!!
No sé en qué momento sentí la necesidad de que me cogiera el ano. Vamos por favor penétrame el ano!! Méteme tu pingo en mi agujerito, vamos mételo ya!!
Te dolerá princesa, y no te quiero lastimar, lo tienes bien cerradito!
No importa hazlo, ya vamos entra, no seas cobarde
Al escuchar la palabra cobarde se molestó tanto que de un solo jalón saco su pinga y de una sola embestida la metió en mi ano haciéndome gritar de dolor
ahhh!!!!
Fue el más terrible dolor que jamás había sentido. Sácalo por favor, me duele, sácalo,
Ahora vas a aguantar hasta que tus entrañas se llenen de la leche de un "cobarde" Me embestía brutalmente y el dolor no cesaba, pero empezaba a mezclarse con placer, un placer intenso que invadía todo mi cuerpo, ahhh!! me vengo princesa, ya me vengo, vas a tener mi leche en tu anito ahhh!!
Y de pronto sentí como su leche invadía mis entrañas, pero él no paraba, era incansable, de pronto saco su pinga de mi ano, me puso boca a arriba, levantó mis piernas lo mas que pudo y me volvió a penetrar el ano, otra vez sentí ese dolor tan intenso, su pinga era demasiado para mi pequeño agujerito, pero ya no se movió, se quedo ahí, pegado a mi culo y gimiendo de placer. Me ha causado gran placer cogerte el culito, princesa, y estas tan apretadita, y gimes como una verdadera puta, pero a la vez gritas como una niñita sufriendo el peor dolor, creo que esta no será la última vez que me veas. Se levanto de mi sacando su pingo de mi culito, me levanto en brazos, ya que yo no tuve fuerzas para levantarme por mi propio pie, me llevo hasta el baño de mi habitación y me colocó en la tina de baño, empezó a llenarla, me empezó a lavar el cuerpo, con mucha delicadeza llego a mi ano, lo trato suavemente, me aseó por completo.
Quién eres, dime por favor? porque me hiciste esto?
No te denunciare, te lo juro.
No te lo puedo decir, al menos no por ahora, quizá después tu sola me reconozcas., por el momento es todo, ya cállate, no digas mas o te castigare nuevamente.
Asentí con mi cabeza.
Me saco del baño me puso mi bata y me recostó en mi cama, limpió el baño, vacio la tina, se vistió, abrió las puertas del balcón y se retiro como si nada hubiera pasado.
Hasta pronto princesa!!