Categorias

Relatos Eróticos

Ultimas fotos

Photo
Enviada por narrador

Photo
Enviada por ELCASUAL

Photo
Enviada por rodolfosalinas


 

La Colegiala XIV

phantom_n Relato enviado por : phantom_n el 13/02/2013. Lecturas: 3698

etiquetas relato La Colegiala XIV   Amor filial .
Descargar en pdf Descarga el relato en pdf
Resumen
Susana va a visitar a un amigo, y su madre tambien...

Otro de los relatos que encontre del gran escritor Tillman



Relato
Francisca sale de clases con una sonrisa que va de oreja a oreja. Nuevamente la mejor nota en ciencias y se asegura de restregárselo en la cara a Susana que esta que revienta de rabia por ello. “Vez, apréndeme a mÍ que estudio y me saco buenas notas cuando quiero” le dice la rubia con prepotencia a Susana. “¡Y esta yegua, a quién cree que engaña, para mi aquí hay gato encerrado y en cuanto averigüe que se trae la voy a ahorcar!” ruge la morena. Gerardo escucha todo y comienza a escabullirse de forma muy discreta. Él va saliendo por un acceso lateral cuando alguien lo jala del brazo y lo hace tropezar de forma bastante aparatosa, al levantar la mirada, se encuentra cara a cara con Susana. “Si quieres hablar conmigo esta bien, pero por favor, ¡no me tires al suelo!” Susana se disculpa con él y de inmediato le ofrece hacer las paces. “No te quejes, además te estaba esperando”, ella lo lleva a un lugar cercano donde ambos se lo montan con todo, otra vez.

Para sorpresa de muchos, Susana y Gerardo ahora constantemente se ven juntos. La morena trabaja con él y en ocasiones, Susana lo defiende de quienes lo molestan y esta el rumor que él “atiende” a la morena de vez en cuando. “La suerte de los feos”, dice uno de sus compañeros lleno de envidia. “¿Me imagino que debe ser bastante bueno?”, le dice Natalia a Susana de forma suspicaz, “¿bueno en que?”, pregunta ella, “ya sabes, no te hagas la estupida conmigo” le responde, “no se de donde sacas eso”, insiste la morena, “será porque una vez dijiste que no te importaba si un hombre era feo o lo tenia chico, mientras supiera como usarlo lo demás son sólo detalles, ¿o no?”, Susana sólo sonríe de forma malévola y de inmediato cambia el tema de la conversación. “Calentona”, le dice Julia, pero Susana no se inmuta en lo absoluto.

“Pero dime quién te enseño a follar así”, le pregunta Susana a Gerardo. “Bueno, algún día te lo voy a decir”, le responde él mientras salen del baño de mujeres bajo la atenta mirada de un par de chicos que con envidia observan a Susana alejarse con él. “¿Qué tendrá este guatón que yo no tenga?”, se pregunta un chico en voz alta, “hombría” le contesta Susana que lo alcanza a escuchar.

Susana esta bastante intranquila, sabe que se le viene encima la prueba de castellano y no quiere que Francisca le gane de nuevo así que se prepara con todo y estudia con Julia y Natalia. Lo que más le molesta, es que mientras ella se mata estudiando, a Francisca no la ve ni siquiera con un cuaderno en las manos. Incluso, la rubia le cuenta acerca de la fiestas a las que ha asistido sólo para provocar aun más a la morena. “Tú algo escondes, a mi no me engañas”, le dice Susana, pero Francisca no la toma en cuenta, “es solo que soy mejor estudiante que tú”, responde la rubia.

La prueba es bastante complicada y muy larga. Susana responde todo lo que puede pero pronto ya esta con problemas, se pone inquieta y el profesor le llama la atención al verla con movimiento extraños mirando hacia su compañero de al lado. “¡Una más y le quito la prueba!”, le advierte el profesor. Susana esta desesperada y no quiere ni pensar en las burlas de Francisca si le llega a ganar otra vez. En ese momento, la rubia se pone de pie y entrega su prueba para sorpresa de todos. “Nos vemos, floja”, le dice a Susana, “¡si la pillo la mato!” chilla la morena.

Susana esta por rendirse cuando Gerardo se pone de pie, va a entregar su prueba y discretamente deja un papel en el puesto de Susana, papel que la morena de inmediato esconde. Mientras Gerardo le entrega la prueba al profesor y cruza unas palabras con él, Susana lo abre y ve las respuestas de toda la prueba. Gerardo sale de la sala y Susana comienza a hacer lo suyo. Al salir de la prueba, la morena busca a Gerardo para darle las gracias, pero Natalia le dice que él se fue y se que notaba muy enfermo.

Gerardo no va a clases en dos días. Susana espera con ansias el resultado de la prueba y la morena esta casi histérica cuando le dicen que tiene un 7. Francisca esta bastante seria y Susana aprovecha de hacer fiesta y desquitarse de las burlas de la rubia, aunque sea por una vez. Susana también recibe la prueba de Gerardo y al salir de clases, se ofrece para ir a dejarle la prueba. Ella lo llama por teléfono y él le da las indicaciones de cómo llegar. La morena toma un taxi y se sorprende cuando tras darle las indicaciones al chofer, este la deja en la puerta de un edificio bastante lujoso. Ella pregunta en la recepción por Gerardo y él baja a buscarla de inmediato. “Vaya… te vez fatal”, le dice Susana, “ni que lo digas, anoche apenas pude dormir un poco por este resfriado”. Susana esta encantada al ver el departamento de Gerardo, “ya quisiera un departamento así sólo para mi”, dice ella mientras se deja caer en un enorme sillón.

Ambos van a la habitación de Gerardo, él le ofrece una cerveza a Susana y la morena acepta de inmediato. Mientras él se la trae, ella revisa su computador y se da cuenta que él estaba visitando sitios porno, al llegar Gerardo se ve sorprendido por Susana: “vamos, no te avergüences, te aseguro que no le diré a nadie” Charlan un rato y Susana le da las gracias por su ayuda. “¿Cómo sabías los resultados?”, le pregunta; “este… es algo difícil de explicar” responde Gerardo, pero Susana no insiste en el punto. “Pero bueno, eso no importa ahora” Tras decir esto, Susana empuja a Gerardo sobre la cama, “ahora relájate y yo me encargaré de darte las gracias como corresponde”

Antes que Gerardo le pueda decir algo, la morena le da un ardiente beso, ella se le monta encima y se mueve sobre él frotando su vientre sobre el miembro de Gerardo que de inmediato se pone bien duro. Susana se abre su blusa, le restriega sus pechos en la cara y él de inmediato se los acaricia y le aparta el sostén para poder chapárselos con sus gruesos labios, algo que a Susana le encanta: “eso es, así… chupa bien mis pechos” le dice ella mientras Gerardo le sube la falda y le va sobando el culo por debajo de la misma.

“Quédate ahí, ahora es mi turno” le dice ella que con un fuerte jalón le baja los pantalones y deja su miembro que ya esta completamente erecto, al descubierto. “Relájate y deja todo en mis manos, o debo decir, en mi boca” Susana cubre la roja cabeza del miembro de Gerardo con sus labios y la acaricia delicadamente, luego lo toma entre sus manos y lo frota y lame como si tratara de un helado el cual chupa con muchas ganas. “¡Me encanta esta verga, es tan dura, tan gruesa, es la medida perfecta para mi!” dice ella para luego meterla en su boca nuevamente.

“¡Vaya, perdón… no sabía que estaban ocupados!” dice una voz femenina. Susana se sobresalta de inmediato y casi se atraganta con la verga de Gerardo, de inmediato, se pone de pie y se cubre los pechos. Parada en la puerta de la habitación, esta una mujer mayor, de unos 40 y tantos años, de cabello rubio ceniza, corto hasta el hombro e intensos ojos azules. Es una mujer elegante y esta vestida de forma sobria pero sexy, traje rojo de dos piezas con una blusa de amplio escote y una minifalda que luce unas hermosas piernas.

“Mamá, pensé que estabas en reunión en la oficina”, dice Gerardo. “¡¿Mamá?!”, exclama Susana sorprendida. “Lo estaba, pero tuve que volver ya que olvidé una carpeta con unos papeles importantes, por lo que veo, estabas ocupado con tu amiga”, dice ella. Susana esta totalmente desconcertada y no sabe bien qué hacer, a lo único que atina, es a cubrir sus pechos mientras siente la lujuriosa mirada de la madre de Gerardo sobre ella. “¡Que horror… qué vergüenza!”, murmura la morena.

“Mamá, ella es Susana, la chica de la cual te he hablado tanto. Susana, ella es Elisa, mi mama” “Así que ella es la famosa Susana… Gerardo me ha hablado mucho de ti y de hecho, me ha contado todo. En realidad, eres más guapa de lo que esperaba” “¡Ay… gracias!”, contesta la morena de forma nerviosa. “Sabes mi niño, esta reunión ya me tiene harta, necesito relajarme un poco, ¿te importa?” “Para nada, dale no más” Susana observa atónita cómo Elisa se besa con su hijo, es un beso lleno de pasión y lujuria y las lenguas de ambos se cruzan. Elisa coge el miembro de su hijo y lo frota con mucha fuerza para después inclinarse frente a él y le hace una mamada increíble, la cara de Gerardo lo dice todo.

Susana no sale de su asombro y observa con cara de no creer lo que ocurre. “¡Usted se la esta…! ¡A su propio hijo!” Elisa se pone de pie y avanza hacia Susana y la mira fijamente mientras le acaricia su rostro: “¿y eso qué tiene de malo?, soy una madre soltera y bien calentona como puedes ver. No me gusta la idea de tener una nueva pareja y tengo necesidades que satisfacer y él ha demostrado ser muy bueno y ha aprendido muy bien” “¿O sea que tu mamá te ha enseñado a f…?”, pregunta la morena. “Claro, tú siempre me preguntabas quién me había enseñado a coger así, ahora ya lo sabes”, responde con satisfacción y orgullo Gerardo.

Elisa mira a su hijo, “¿puedo?”, pregunta. “Adelante, con confianza”, dice él. Susana es tomada por sorpresa por Elisa, que le da un beso metiendo a la fuerza su lengua en la boca de la morena y desliza su rodilla entre las piernas de Susana. Ambas caen sobre la cama y Susana queda debajo de Elisa que le frota su coño con la rodilla. La morena hace un atisbo de resistencia, pero pronto comienza a ceder. Elisa le demuestra la experiencia que posee en estos temas, con habilidad, mete sus manos bajo la falda de Susana frotándole su entrepierna. La madre de Gerardo se quita su chaqueta y se abre su blusa descubriendo sus pechos que, de inmediato, empieza a restregar contra los senos de Susana. Besa en el cuello a la morena que esta bajo el completo control de Elisa. L rubia comienza a descender por el cuerpo de Susana que se retuerce y gime al sentir los dedos de Elisa metiéndose con tanta fuerza en su sexo. “Vamos a degustar ahora ese coño”, dice Elisa. Gerardo observa atentamente lo que ocurre y se hace una feroz paja mientras su madre se tira a Susana.

“No seas flojo, ven acá”, le dice Elisa y Gerardo, como buen hijo que es, le obedece de inmediato y pone su miembro en la boca de Susana que de inmediato lo recibe. Elisa se quita su falda y calzón y comienza a lamer el coño de Susana que se ve atragantada con Gerardo que le mete su miembro hasta el fondo. La morena esta completamente a merced de ambos. Susana se retuerce sobre la cama ante las intensas caricias que Elisa le da, mete su lengua y sus dedos por todos los agujeros de la morena. Gerardo toma su miembro y lo pasa entre los pechos de Susana que lo aprieta entre ellos. “Dale con todo”, Elisa se monta sobre Susana y pone su coño en la cara a la morena, que de inmediato se lo empieza a lamer ansiosa por devolverle las caricias. Elisa le separa bien las piernas y Gerardo pone su miembro contra el coño de Susana penetrándola de una sola vez. Alentado, “así es mi niño, dale… hazla gritar” le dice Elisa mientras se besa con su hijo. Susana le demuestra a Elisa que ella también sabe cómo lamer un coño.

Gerardo se recuesta en la cama, entre Elisa y Susana se encargan de saborear su miembro, “ahora debes satisfacer a tu madre” dice Elisa que se monta sobre él que de inmediato le comienza a cabalgar. Susana se pone sobre Gerardo para que este le haga sexo oral a ella. Ambas mujeres se dan con todo, unos besos donde sus lenguas se cruzan y frotan sus pechos entre ellas. Susana esta sorprendida pues nunca se había topado con una mujer tan fogosa como la madre de Gerardo. Susana queda recostada de estomago sobre la cama, Gerardo se pone sobre la morena y le arremete con todo, como a ella le gusta. La cama cruje ante las acometidas que Gerardo, con su grueso miembro, le da al coño de Susana. La morena gime como loca y se estremece al ser penetrada de forma tan salvaje. “¡Más adentro… vamos, qué esperas!” le grita Susana a su amigo.

“Ven acá niña, tengo algo para ti” Elisa le enseña a Susana un gran consolador doble que entre ambas comienzan a chupar y lamer. Elisa se acuesta en la cama y se lo mete en su sexo, luego Susana, de inmediato, se monta sobre ella metiéndose el otro extremo en su coño. Entre ambas comenzaron a follarse mutuamente en medio de ardientes besos y caricias, sus coños se frotan intensamente y sus lenguas se cruzan a cada momento. Gerardo no esta de ocioso ante este espectáculo de su madre fallándose a su ardiente compañera de curso, le separa las nalgas a Susana y comienza a deslizar su lengua por su culo y presiona directamente sobre su ano. “Vamos hijo, rómpele el culo” Elisa abraza a Susana y con sus manos le abre el culo, la morena respira de forma agitada como esperando sentir aquel miembro en su culo “¡Aaaahhh!” exclama Susana a medida que Gerardo va metiendo su miembro por el estrecho ano de la morena, con una fuerte acometida, él se lo mete hasta la mitad y luego con otra aún más fuerte. “¡Lo tienes muy grande y duro!”, grita la morena.

Madre e hijo se follan simultáneamente a Susana hasta dejarla sin aliento, la morena se entrega a ambos que la follan con todo, le dan por ambos agujeros. Susana se mueve salvajemente entre ambos para recibir los dos miembros, el de látex y el de carne. Ella agita sus curvas y frota sus pechos contra los de Elisa, se besa con ambos mientras su sudado cuerpo es penetrado una y otra vez. “¿Te vas a correr!?, ¡hazlo sobre nosotras!”, dice Susana. Gerardo saca su miembro del culo de su amiga y se corre sobre ella y su madre, su semen es espeso y calido y ambas lo saborean y degustan mientras se escurre sobre sus rostros y sus cuerpos. Ambas se dan unos besos degustando el semen que corre por sus bocas y sus cuerpos, para luego quedar los tres extenuados en la cama.

“¡Rayos, la hora que es… debo irme!” dice Elisa que de inmediato va al baño a limpiarse rápidamente y después a vestirse. Susana y Gerardo, más lentamente, comienzan a hacer lo mismo. “Fue todo un placer conocerte y espero verte de nuevo por aquí”, le dice Elisa que se despide de Susana con un beso. “Y tu no hagas desarreglos, sino, no te vas a mejorar”, dice a su hijo. “Vaya… tu mama es toda una mujer, debería darle las gracias a Francisca” “¿Y por qué darle las gracias a Francisca?”, le pregunta Gerardo a Susana que se muestra algo incomoda. “Yo creo que hay algo que deberías saber, ya que cuando follamos por primera fue por…”, “una apuesta que perdiste con la Francisca”, dice Gerardo. Susana lo mira extrañada, “yo creo que hay algo que tú deberías saber primero”, dice él.

Francisca esta en el recreo vanagloriándose de su nota en ciencias, nuevamente le ganó a Susana y se lo recordó toda la clase, pero esta vez Susana mantuvo la calma, a diferencia de las ocasiones anteriores. “Muy feliz, me imagino” le dice la morena apoyada en la puerta del baño, “pues claro, te gané de nuevo, soy mejor estudiante que tu” dice la rubia, “es que memorizar los resultados de una prueba es bastante fácil”, dice Susana con una sonrisa maliciosa dibujada en su rostro; “no sé de que hablas”, responde Francisca y se pone a la defensiva. “Hablo que tú hiciste trampa y que te sabías los resultados de los exámenes antes” Francisca se ve sorprendida un poco, pero disimula: “pues pruébalo, entonces” responde con prepotencia la rubia.

Francisca va a salir del baño pero Susana la detiene y en ese instante aparece Gerardo detrás, la rubia lo mira y entiende todo. “¡Túúú…, pequeño y miserable soplón!” exclama hecha una furia. “Lo siento, pero Susana me ofreció un mejor trato”, responde él que se despide de la morena. Francisca sabe que está en problemas. “Muy bien, ¿qué es lo que quieres?, habla de una vez” “¿Y cómo sabes que quiero algo?”, “por que de lo contrario, ya me habrías delatado, así que habla de una vez, perra” “Bueno, ya que lo pones de esa forma… Pues para empezar, una cena en un restaurante italiano, sabes que encanta la comida italiana. Después me vas a llevar a mí y a unas a amigas al concierto de la próxima semana en la disco del centro, y también esos jeans blancos que te compraste, al menos esto para empezar”, dice Susana mientras Francisca sólo se lamenta.

Otros relatos eroticos Amor filial

me folle a mi hijo de 17 años

Categoria: Amor filial
Me folle a mi hijo de 17 años
Relato erótico enviado por Anonymous el 09 de April de 2007 a las 18:39:16 - Relato porno leído 1355359 veces

minetras me hacia la dormida

Categoria: Amor filial
Lo que pasa mientras aparento estar dormida... es un secreto de hermanos, ahora tambien lo sabeis vosotros...
Relato erótico enviado por bichitita7 el 07 de December de 2004 a las 17:07:30 - Relato porno leído 1110071 veces
ESTE ES EL RELATO 100% REAL Y 1000% CALIENTE DE COMO MI PEQUEÑA PRIMA Y YO HEMOS PASADO GRANDES MOMENTOS DE AMOR INCESTUOSO CALIENTE Y PROHIBIDO
Relato erótico enviado por elgoloso el 21 de May de 2008 a las 22:00:00 - Relato porno leído 1026143 veces

traumatico incesto

Categoria: Amor filial
Cogí a mi hijo, aún no podemos superarlo.
Relato erótico enviado por martita el 02 de July de 2004 a las 14:39:38 - Relato porno leído 969345 veces

una historia de incesto

Categoria: Amor filial
una historia de incesto
Relato erótico enviado por Anonymous el 14 de December de 2007 a las 13:35:08 - Relato porno leído 764694 veces
Si te ha gustado La Colegiala XIV vótalo y deja tus comentarios ya que esto anima a los escritores a seguir publicando sus obras.

Por eso dedica 30 segundos a valorar La Colegiala XIV. phantom_n te lo agradecerá.


Comentarios enviados para este relato
katebrown (18 de October de 2022 a las 21:21) dice: SEX? GOODGIRLS.CF


Registrate y se el primero en realizar un comentario sobre el relato La Colegiala XIV.
Vota el relato el relato "La Colegiala XIV" o agrégalo a tus favoritos
Votos del Relato

Puntuación Promedio: 1
votos: 1

No puedes votar porque no estás registrado