Mi cuñada viuda de mi hermano mayor

Somos pescadores desde hace mas de tres generaciones, mi abuelo, mi padre ahora nosotros sus hijos, lamentablemente este trabajo siempre va acompañado de las acciones del mar y esta vez hemos perdido un hermano, mi hermano mayor 28 años casado con Andrea de 23 años y con dos hijos de tres y un año…., esta mujer no sabe que hacer ya que al quedar sola nadie tiene que la proteja a ella y sus hijos. Me solicita ayuda , se la doy y me vengo a vivir a casa de mi hermano fallecido… claro que ellos solo tenían dos camas en una dormían ellos y en otra los niños.

Llevo una semana en esta casa y Andrea duerme con sus hijos y se siente incómoda en la cama con sus hijos y casi no duerme, aprovechando cuando me levanto a las cuatro de la mañana ya que a las cinco salimos de pesca con el bote con los demás pescadores de acomodarse en la cama caliente dejada por mí y dormir hasta tarde, tipo nueve de la mañana, un día la mar está muy mala y la gobernación marítima no nos permite salir de pesca y alrededor de las siete horas volvemos a casa, encontrándome con mi cama ocupada. Me acomodé como pude en un resto de ella despertándose Andrea, avergonzada quiere levantarse y se lo impido, nos acomodamos ambos en la cama y el sentir el cuerpo de esta mujer que admiraba por su bonito cuerpo, sentir su calor, sentirla respirar en mi espalda me provocó y estimuló aguijoneándome en mis deseos de poseer a esta hembra que había satisfecho varias noches a mi hermano… lentamente mis piernas se juntaron a las de ella, ella no me rechaza y no se altera, me aproximo a su cuerpo haciéndome el dormido…, trata de apartarse, pero recapacita y me deja apegarme a su cuerpo en eso comienza a llover con truenos y relámpagos, Andrea se asusta y se abraza a mi cuerpo… exquisito sentir sus senos apretados a mi pecho…, esto excita aun mas a mis hormonas y mi pene se endurece y desarrolla estimulado, Andrea siente esa daga clavarse entre sus piernas… me mira sorprendida, pero otro trueno y mas relámpagos la acomodan mas apretada a mi cuerpo y mi pene esta entre sus piernas a la entrada de su vagina, ella lo siente y se estimula abriéndose de piernas permitiendo a mi musculoso y desarrollado miembro a comenzar su penetración en su vagina, otros truenos ayudaron a que ella se entregara sin reclamos al susto de estos ruidos que la ponían nerviosa, para no sentirlos se acurruca en mis brazos permitiéndome penetrar mi pene hasta el fondo de su matriz, luego no sintió ruidos de truenos ni nada, solo sentía placer de ser nuevamente mujer utilizada por un macho que la deseaba y ella gemía y siseaba alborozada al ser ágilmente ensartada, no sintió ruidos de truenos y rayos solo sentía la respiración del macho poseyéndola y ella alborotada excitada resistiendo las duras penetraciones del apareamiento dado por su cuñado, cuanto placer le daban y cuando su cuñado vacía sus leches en ella, esta gime y grita activada por el delicioso coito que después de casi un año le estaban entregando y sus piernas crispadas apretaban por la espalda a su cuñado su nuevo macho, su nuevo marido que la saciaba de sus angustias y deseos carnales. Se abría lo que mas podía de piernas para no ser mal tratada y sus brazos se colgaban del cuello del macho que la forzaba y exigía a su vientre placeres que ella con delicia y gustosa entregaba para saciarlo y satisfacerse. Luego el relajo y el sueño abrazado a su cuñado durmió su nuevo sueño, tenía un nuevo macho y tendría que satisfacerlo varias veces mas para tranquilizarlo esa mañana de cruda lluvia y fuertes vientos. En esa cama solo se escuchaba el chirriar del catre ante la dura lucha carnal que en ella se desarrollaba, tres veces fue empotrada antes de que se relajaran y saciaran sus ímpetus, casi al medio día ambos se levantaron acariciándose y prometiéndose ser el uno para el otro…