Categorias

Relatos Eróticos

Ultimas fotos

Photo
Enviada por narrador

Photo
Enviada por ELCASUAL

Photo
Enviada por rodolfosalinas


 

Mi unico y prohibido amor

Relato enviado por : montesrecinos el 08/02/2009. Lecturas: 4136

etiquetas relato Mi unico y prohibido amor .
Descargar en pdf Descarga el relato en pdf
Resumen
Mi infancia fue miserable, asi llegue a una casa a atender a una paciente, me enamore de su marido y le entregue todo.



Relato
Hola a todos soy Wendy, tengo 20 y desde que era menor de edad me ha gustado leer historias eroticas en la red, y quiero compartir lo mejor que me ha pasado a mi corta edad. Aun sueño con esos encuentros, pero el final no es de cuento de hadas.

Provengo del Orfanato de la ciudad, como han de imaginar mi infancia fue muy miserable, pese a mis limitaciones pude estudiar Auxiliar de Enfermería en la Escuela de Enfermería, pero para mi sustento allí, me tuve que hacer novia de el Director del Orfanato, al igual que varias chicas allí, este mal nacido se quedó con mi inocencia y mi virginidad, pero pude a raíz de eso salir de allí y valerme por mi misma.

Una profesora de la Escuela de Enfermería, me ayudó a conseguir trabajo, se trataba de cuidar y atender a una señora que llamaremos Josefina, quien tenía un cancer avanzado en el estomago y estaba en la fase casi terminal. Mi profesora lo estaba atendiendo pero me dio la oportunidad de que yo lo hiciera, la paga era muy buena, ya que era una familia adinerada.

Aunque no conocí a mis padres, le doy las gracias, ya que no soy fea y tengo un bonito cuerpo aún en desarrollo, soy de tez morena clara, tengo unos senos medianos de buena forma, mis piernas son llenitas y tengo una cintura bien hecha y tengo unas nalgas lozanas bien apetecibles. Aunque mi estadía en el Orfanato me dejó muchos complejos, como el de no mostrar libremente mi cuerpo, era retraída en ese aspecto y siempre lo tapaba con ropa fuera de moda o a través de mi uniforme largo de enfermera.

En esa casa solo vivían la señora Josefina y Edgar su esposo, un hombre de treinta y tantos años, es muy guapo, fuerte y bien presentable, el tipo de hombre que hace voltear a una mujer. Tenían dos hijos, pero ambos estudiaban en un Colegio de los más distinguidos de la capital y eran internos, o sea que los veían cada quince días o tres semanas.

Mi trabajo consistía en cuidar de la señora Josefina mientras que su esposo estaba en su empresa trabajando, él llegaba como a las 6:00 de la tarde y yo me iba a las 7:30 de la noche más o menos. Me encantaba verlo vestido con su traje y creo que el se daba cuena que yo me ponía nerviosa cada vez que platicabamos, tenía una personalidad fuerte que chocaba con mis complejos de inferioridad.

Al principio todo iba con normalidad, pero conforme me iban pagando por mis servicios, yo invertía un poco más en mi aspecto, iba a salones de belleza, me compuse el cabello, ahora me pintaba, me compré ropa más adecuda y sexy y también compré un uniforme de enfermera mucho más moderno, un poco más corto que el anterior. Estaba contenta con mi misma, y creo que el señor Edgar también lo había notado, ya que ahora se me quedaba viendo mi silueta cuando el creía que yo miraba a otro lado.

La señora estaba tan debil que no notaba que su marido me coqueteaba en ocasiones. Yo no puedo negar que me gustaba que él se interesara por mi, ni puedo negar que me gustaba su tipo de hombre muy varonil.

Cierto día la señora tuvo una crisis, tuve que atenderla fuera de horario, llegó el médico y me felicitó por el tratamiento y la terapia que había utilizado, eso me llenó de mucho orgullo, cuando me despedí ese día del señor Edgar me dijo que me agradecía y que lo menos que podía hacer era encaminarme a mi apartamento, que era un cuartito que yo pagaba en una colonia bastante popular. A una cuadra, antes de llegar le dije que me podía dejar allí, el se estacionó y comenzó una conversación, yo le seguí la plática, el me decía que se sentía solo y que la enfermedad de su esposa lo tenía triste y no tenía a nadie con quién hablar, luego me hizo preguntas de mi vida, pero yo no le conté todo, sino una parte, que no tenía padres y que vivía sola en un departamento. Para terminar me despidió de beso en la mejilla, algo que nunca había hecho. Además me dijo que era una chica muy bonita y que mi novio era un chico afortunado, yo le respondí que no tenía novio.

En los días siguientes, siempre se ofreció llevarme, poco a poco entablamos algo más que una relación entre patrón y empleada. Debo confesar que él me fue gustando mucho, además de ser bien parecido era todo un caballero y tenía modales que muchos hombres deberían de tener. Y bueno sucedió lo que tenía que suceder.

Esa noche él también se había ofrecido a llevarme a mi casa, me fue hablando de lo bueno que era en mi trabajo y lo mucho que estaba agradecido. Nos quedamos charlando un rato dentro de su vehículo afuera del edificio donde estaba mi apartamento, nos rodeo una atmosfera confortable, cálida y amigable. De repente me tomó de las manos suavemente y me acercó a él, me besó apasionadamente, a los pocos segundos su lengua se introdujo en mi boca, yo respondí y nuestras lenguas jugaron un poco en cada una de nuestra bocas, creo que fue un beso anunciado, luego el recorrió con su lengua mi cuello, orejas y fue bajando, con sus manos bajo el cierre de mi traje de enfermera que está en el frente y metió una mano entre mi bra y acarició delicadamente uno de mis senos. Lo detuve, y le dije que si quería pasar a mi humilde departamento, él accedió, subimos al segundo nivel y apenas entramos me tomó de la cintura y me atrajo hacia él para darme otro delicioso beso.

Alli parados, me recostó contra la pared y siguió besándome los labios y el cuello, su lengua me producía una rica sensación, nuevamente bajó el cierre de mi traje y lo abrió al medio, me acarició mis senos sobre y luego dentro del sujetador, sus dedos acariciaban y me apretaban suavemente los pezones que rápidamente se erectaron, luego el bajó su boca y sus labios recorrieron la longitud de mis dos senos, lamiéndolos con mucha pasión, yo me derretía allí parada por sus caricias.

Mientras sus labios degustaban mis dos senos, deslizó con mucha astucia una mano entre mi calzón tipo bikini, con sus dedos jugó con mi vulvita peluda, asi como toda mi región pelvica. Acarició con mucha experiencia mis labios mayores y luego una de sus falanges ingresó en el interior de mi vagina, produciendome que me comenzara mojar. Yo estaba feliz, queria desde hace unas semanas sentir sus labios y su cuerpo pegado al mio y en este momento nada lo iba a impedir.

Edgar me cargó en sus brazos y me tendió en la cama, me sacó con delicadeza mi ropa interior dejándome desnuda a su merced, abrió mis piernas y sumergió su cara entre ellas, comenzó lamiéndome alrededor de mi vulvita, parece ser que mi vello pubico le dificultaba un poco su técnica, sin embargo se las arregló e inció a chuparme mis labios mayores los introducía entre sus labios y los chupaba, eso me hacía estremecer cada vez que lo hizo, luego con sus dedos abrió mi vulvita y lamió con mucha propiedad toda la parte exterior de mi vagina, en ese momento sentí una corriente eléctrica que me recorrió todo el cuerpo, acaso un orgasmo me estaba invadiendo.

Me aferré a su cabeza y por la excitación casi le restregue mi sexo en su cara, él siguió mamándome el coño, se podía oir el ruido que hacía su boca y lengua chupandome la intimidad, no conforme de ya que me tenía muy excitada y lista para penetrarme, me hundió dos de sus dedos en mi vagina, moviendolos hacia dentro y hacia fuera y girándolos adentro, mientras su lengua se encargaba de su clítoris. Nunca me habían comido el sexo de ese modo, mi vagina era un charco de líquidos lubricantes.

Cuando se sació de mi coño, se desvistió enfrente de mi, pude ver que su pene era de muy buen tamaño, su cuerpo estaba muy bien desarrollado, además tenia unas buenas ponpis que adornaban su silueta. Se hincó a un lado de mi y tomándose la pija erecta con la mano la dirigió a mi rostro, era claro que quería que se la mamara, asi que me puse de lado acostada y comence a darle algunos timidos besitos a su glande, luego lo metí en mi boca y lo chupé por dentro, a él pareció gustarle el tratamiento, después lo levanté con las manos y le lamí todo el tronco bajándo hasta el escroto, lugar donde le chupé cada testiculo, en esos momentos Edgar gimia fuertemente.

Repetí el mismo tratamiento un par de veces, su pija parecía que iba a estallar de lo hinchada que estaba, para finalizar la metí en mi boca varias veces y la chupé con todas mis fuerzas, pude sentir un poco de sabor salado, debió ser que sus líquidos pre-eyaculativos estaban saliendo por la excitación. En ese momento le dije que lo quería dentro de mi cuerpo. El se colocó entre mis piernas y recostándose sobre mi cuerpo su enorme pija me fue penetrando, gracias a su rica mamada de coño, mi vagina estaba bien lubricadita, ya que hasta ese momento era el pene más grande que se metía en mi cavidad vaginal, a pesar de eso sentí toda la inmensidad de su pija abriendo mis paredes interiores, jadee y cerré los ojos para gozarla a plenitud, poco a poco la deslizó hasta que estuvo toda adentro, al fin lo tenia como lo había soñado incontables veces.

Luego de eso, comenzó a cogerme rítmicamente, con un vaiven suave, nuestras bocas se volvieron a unir en un beso húmedo, yo lo abrazaba por los costados y mis pies lo enlazaban por sus caderas, quedamos bien pegados moviendonos en un rico compás. El ritmo fue aumentando de velocidad y fuerza, su pija ahora entraba y salía de mi vagina mucho más rápido, su boca estaba estacionada en mis dos senos, chupándome los pezones, recuerdo todo eso me daba la sensación más bella que me sucedía en mi vida, tuve un orgasmo divino, gemí como loca, le pedía que esto no terminara nunca.

Edgar siguió follandome un rato más en esa posición, pero Edgar no tenía intención de terminar la fiesta allí, luego de esperar que terminará mi orgasmo, me colocó en cuatro, yo le enseñé mi bien formado trasero y por unos segundos el se quedó como contemplándolo, se acercó y comenzó a lamer mi culito mientras me clavaba dos dedos en mi gruta mojada, con sus dedos me empezó a penetrar con fuerza mientras el lamía y me chupaba mi ano, yo aún era virgen de mi culito y aunque el sexo anal no era de mi agrado, su chupada me produjo un placer inmenso. Después el se colocó por detrás y me volvió a penetrar mi vagina con su pija erecta, en esta posición perruna parecía que su pija era más grande y gorda, sentí como si me llegara hasta el utero. Nos metimos en otro ritmo delicioso, el follandome duro y yo moviendo mi trasero para deleitarnos, asi también el jugaba con mis nalgas y con el esfínter de mi ano.

Nuevamente me corrí entre quejidos, Edgar aceleraba y detenía sus movimientos pelvicos para durar más tiempo cogiendome, más adelante sentí que estaba cerca de su venida, como suelo llevar un control de mi periodo, le dije que podía terminar adentro de mi vagina, oí un minuto más tarde su bramido y sentí un chorro inmenso de esperma caliente colarse en el interior de mi vagina, fue exquisito!.

Su pija daba palpitaciones como un corazón, y cada vez que lo hacía arrojaba un poco más de esperma, mi vagina no fue suficiente para retenerlo todo, unos hilos de su leche salieron y cayeron por mi vulva.

Nos quedamos un rato sobre la cama desnudos, aún besándonos y diciendonos palabras bonitas, luego el se vistió y se marchó. Alli empezó nuestro romance.

Al siguiente día, después de que él llegó del trabajo por la tarde y de preguntar por la enferma, me sacó de la habitación y pegándome contra la pared, me dió otro rico beso, acompañado de un manoseo de mis senos y vulva. Me dijo que quería que me quedara con él esa noche, yo no pude negarme, quería sentir su cuerpo otra vez dentro del mio.

Lo primero que hicimos fue tomar una ducha juntos, allí besó mis senos a placer y yo le hice una rica felación para ponerlo listo. Me pidió si podía rasurarme la vulvita, yo me quedé un poco como avergonzada, pero luego el me besó y me dijo que el me lo haría con mucho cuidado, asi que durante la ducha el me rasuró mi coñito, tardó unos diez minutos entre risas y bromas, finalmente mi coñito quedó como el de una niñita sin pelitos. Yo notaba que el estaba fascinado con el nuevo “look” de mi vulvita, se le hacía agua la boca. Me llevó a la cama y me pidió que me montara sobre su cara, quería chuparme mi vulva recien rasurada de ese modo. Me encaramé sobre el y sujetándome las piernas con sus brazos me dio la mejor mamada de coño de mi vida, su boca y su lengua lamieron y chuparon todo mi sexo, yo eyaculaba mis líquidos vaginales que se mezclaban con su saliva espesa, lamía sin cesar mi vagina y mi clítoris, no sé como enrolló su lengua, pero pude sentir su apéndice bucal penetrar mi vagina varias veces y tocar mis paredes internas, yo al poco rato de este tratamiento estallé en un sonoro orgasmo, suerte que la habitación estaba lejana con respecto a donde estaba la señora, porque si grité abundantemente de placer. Sentía que un orgasmo me venía de tras de otro, que climax por dios!.

Casi desfallecida por energía gastada en esos orgasmos, me colocó de nuevo en cuatro, me lamió de nuevo mi culito y mis nalgas, luego vi que sacó un bote de una gaveta de la mesa de noche, el bote me era conocido, era una jalea especial para relaciones anales que vende popularmente, me imaginé que Edgar tenía anteriormente relaciones anales con su esposa y lo tenía guardado allí, ese bote lo había visto antes con mis compañeras en la Escuela de Enfermería. Me colocó esa jalea en mi esfínter y ano, yo le pedí que lo hiciera con mucho cuidado, ya que el sería el primero en metermela por ese agujerito, luego se colocó en posición y empujó su pija lentamente, el glande se fue metiendo en mi colita, gracias a su efecto anestesico, pudo meter después de unos minutos toda la inmensidad de gorda pija en mi recto y con poco dolor. A pesar que en esta primera vez no obtuve mucho placer, me gustó satisfacer a mi hombre, ya que el estuvo gimiendo fuerte durante toda su embestida anal. Se veía la satisfacción en su cara. Sin embargo le pedi al largo rato que quería sentirlo en mi coñito.

Edgar con mucha experiencia, entró al baño a lavarse su pene y regresó rápidamente para colocarme en la cama y clavarmela duro en la vagina, nuevamente sentí tocar el cielo, me folló duro y me hizo gozar tanto que me corrí en pocos minutos. Luego me pidió que me subiera encima de su pija estando acostado boca arriba, asi que me monté sobre su miembro viril y después de meterme su pija le cabalgué con todo el deseo, restregué mi vulva innumerables veces sobre su pija, de modo que solo sus testículos quedaban por fuera. Nos metimos nuevamente en un delicioso ritmo, el entrando y saliendo de mi coño, finalmente entre quejidos depositó otro chorro inmenso de esperma dentro de mi vagina. Yo por mi parte me vine en otro sonoro orgasmo.

Me bajé de su pija y me quedé un rato descansando sobre la cama. Al poco rato le avisé que me marcharía a mi apartamento, Edgar me suplicó que me quedara con él toda la noche. Quería que siguieramos gozándonos. No tuvo que rogarme para que lo hiciera. Durante la noche tuvimos otros dos encuentros sexuales inolvidables, fue una noche de sexo y lujuria. Me la metió en varias posiciones no conocidas, me hizo mamarle su pija y me obligó a tomarme su lechita, lo cual hice con mucho gusto. Por la mañana casi al salir el alba me volvió a poseer el culito, esta vez sentí mucho más placer, hasta casi pude sentir que iba tener un orgasmo con su pija en mi recto. Fue la noche más deliciosa de mi vida.

Nuestros encuentros siguieron varias semanas, a veces regresaba de su trabajo más temprano y me metía en cualquier habitación para poseerme. Teniamos que ser cuidadosos para que la servidumbre no lo notara. En ocasiones habían parientes en su casa. Su esposa entró en varias crisis, pero siempre salía adelante. Para ese entonces yo ya estaba muy enarmorada de Edgar, pero no sabía si él lo estaba de mi, o solo le gustaba como amante. Asi que armada de valor le dije que ya no quería ser la enfermera de su esposa, que si me quería de verdad me buscara cuando todo esto acabara. De eso hace dos meses y no se si hice bien o mal, me muero por tener sentir sus labios y su pedazo de carne dentro de mi.


Otros relatos eroticos Confesiones

mi madre la puta de mis amigos1

Categoria: Confesiones
Mi Madre, a sus 42 años, es una hembra que está rebuena. Mi Padre, un pobre idiota. Así que una noche decidí darle marcha a ella con mis amigos, mientras mi padre miraba..........
Relato erótico enviado por domo54 el 12 de December de 2008 a las 11:35:56 - Relato porno leído 304550 veces

un negro para mi esposa

Categoria: Confesiones
UN NEGRO PARA MI ESPOSA.

DESPUES DE CAER EN LA RUTINA, CUANDO AFORTUNADAMENTE ME ENTERE DE LAS FANTASIAS DE MI ESPOSA, SUPE QUE NECESITABA UN NEGRO PARA NI ESPOSA
Relato erótico enviado por Anonymous el 30 de March de 2009 a las 23:47:21 - Relato porno leído 253791 veces

mis primas virgenes

Categoria: Confesiones
Nos encontrábamos mi mejor amigo Jhon y yo en una finca con toda su familia de el y la mía pasando las fiestas de Nuevo año
Relato erótico enviado por antonio el 27 de December de 2005 a las 12:20:37 - Relato porno leído 209483 veces

la nueva sirvienta

Categoria: Confesiones
Era un día normal, común y corriente, yo regresaba de la prepa, yo soy un chavo moreno, alto, con buen cuerpo, bien dotado y muy atrevido, no tengo novia y ese día fue uno de los mejores en mi vida
Relato erótico enviado por Anonymous el 29 de August de 2008 a las 13:06:42 - Relato porno leído 206320 veces

por el perreo comence

Categoria: Confesiones
Mi nombre es Alicia, y hasta no hace mucho mi familia, y yo desde luego vivíamos en un retirado pueblo, en el que apenas y nos enterábamos de las noticias, ya que ni tan siquiera llegaba la señal de la Tele. Por lo que cuando nos mudamos a la ciudad, lo que más me impresionó fue el baile del perreo
Relato erótico enviado por Narrador el 04 de June de 2012 a las 23:00:35 - Relato porno leído 145963 veces
Si te ha gustado Mi unico y prohibido amor vótalo y deja tus comentarios ya que esto anima a los escritores a seguir publicando sus obras.

Por eso dedica 30 segundos a valorar Mi unico y prohibido amor. montesrecinos te lo agradecerá.


Comentarios enviados para este relato
katebrown (18 de October de 2022 a las 22:12) dice: SEX? GOODGIRLS.CF

katebrown (18 de October de 2022 a las 19:45) dice: SEX? GOODGIRLS.CF


Registrate y se el primero en realizar un comentario sobre el relato Mi unico y prohibido amor.
Vota el relato el relato "Mi unico y prohibido amor" o agrégalo a tus favoritos
Votos del Relato

Puntuación Promedio: 3.6666666666667
votos: 3

No puedes votar porque no estás registrado