Muchacho llega a vender libros y sale con rica chupada de pitote

Relato enviado por: Anonymous el 4/2/2018. Lecturas: 3123
Etiquetas: Gay

Relato completo

Trabajo en una tienda y ese día estaba por cerrar cuando se apareció un muñecote y me ofreció libros en venta, pero le cambie la jugada ya que estaba super caliente . Hola como dije antes estaba por cerrar, cuando llegó a la tienda un muchacho de no más de 22 años, yo estaba muy cachondo, ya que regularmente cerraba y me quedaba un rato dentro, ya que los vidrios son aumandos y me gustaba espiar a las parejas que se ponían a cachondear por ahi.

Entonces me dijo que vendía libros, traducción al inglés y no sé que más, pero fue muy impactante ya que ese jóven era muy guapo, realmente era un bombón, traía puesto un pantalón de vestir color gris y una camisa azul cielo,. alto , blanco con unos ojasos bien bonitos, él me explicaba, pero yo estaba caliente, en ese momento sonó el teléfono de la tienda, y contesté en un mueble de madera de aproximadamente 1.10 donde estaba el teléfono, en tanto observaba las piernas, y el cuerpo y le veía sin ninguna discrección directamente al paquete, luego colgué y siguió explicandóme, yo no dejaba de mirarle el paquete, para que se fuera dando una idea y en cierto momento ya no aguanté más...

Viendo que se le había parado, y tenía la cabeza de la verga esplendidamente dibujada hacía un lado del pantalón, alargue mi mano y se la toqué, la cabeza, diciéndole ¨ mira que rico ¨entonces se echo para atrás y le hice mi oferta, - bueno dices que el libro cuesta $ 100 ien pesos, de ahi te darán una comisión, si acado del $ 30 % por cierto, bien,. ¿ qué te parece qué mejor te doy los 100 cien pesos a ti ? y me dejas chuparte este rico carmelo que ya esta parado y el libro lo vendes más adelante.

Más o menos lo pensó y aceptó aún tímido, cerre la puerta de vidrió y me acerqué a él, bajandole el pantalón y saqué la verga, muy rosita, grande y llena de pelitos y rápido la engullí ya que tenía muchas ganas de provar su lechita, se la estuve chupando más o menos , ni rápido, ni lento, le apretaba las nalgotas bien duras que tiene, y también le chupe un poco las bolas, y regresé al camontón, eso si, disfrutando mucho esa carne deliciosa y rica, y entonces sentí que pronto se vendría, abrí más la boca y me comenzó a caer toda la cremita dentro que obviamente paladee como una perra, ya que estaba super caliente, y me la comí toda. Creánlo o no es cierto y todo esto pasó hace quince días acá en Morelía Michoacán Méx.