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En la colonia (barrio) donde vivo siempre han existido chicas guapas y muy atractivas, pero ninguna como Arleen. Hija de una viuda, rica por herencia, era lo que conocemos en México como una chica "fresa" o chica "bien". Sin embargo nunca acaparó la atención de todos los hombres de la colonia (y quiero decir TODOS: Solteros, casados, viejos, niños y jóvenes calientes como yo) hasta que curso el sexto año de primaria. Arleen es linda, de tez blanca, de ojos cafes muy claros, cabello rizado natural, largo, hasta la cintura, y hoyuelos en sus mejillas. Fue en ese sexto año de primaria que sus carnes comenzaron a florecer: su falda comenzó a resentir el empuje de sus carnosas, poderosas nalgas, su breve cintura las hacia resaltar más, pero lo que hacia realmente palidecer a cualquiera cerca de ella (ya fuera macho, de lujuria, u otra chica de envidia y sopresa) eran sus cada vez más suculentos senos, realmente sorprendentes. Sus uniformes escolares simplemente se tensaban ante ese glorioso par de enormes tetas, los botones de su blusa apenas resistian a esos deliciosos melones que llenaban de lujuria a cuanto guarro se cruzaba en el camino de Arleen...incluyendome.

En un principio, yo no hablaba con ella. No fue hasta que ella cursaba el segundo año de secundaria (y yo, el segundo año de la universidad...je je) que tuve el valor para hablarle. Fue una ocasión que ella caminaba por la calle que me decidí a abordarla. Ella se mostró un poco retraída, pero al reconocerme como vecino y a medida que fluia la conversacion, aumentó su confianza. Esa ocasión vestía un diminuto top naranja en el que lucia sus enormes tetas apretaditas, junto con unos vaqueros azul claro a la cadera y muy, muy ajustados. "Dios...esta riquísima", solo de verla me ponia nerviosos. Platicamos otro rato, y asi me di cuenta que todavía era una niña, pero con un cuerppo de mujer que realmente causaba envidia entre toda mujer, de cualquier edad que la viera.

Asi nos hicimos amigos, comenzamos a salir, al cine, a jugar basketball, tomar un simple helado, cosas asi. Una ocasión, en su casa, y con el pretrexto de ayudarle a hacer tarea escolar, y a manera de juego, le dije que bailaramos. En la radio sonaba una canción de moda, de reggaeton, Arleen, se levantó y comenzó a mover deliciosamente su cuerpo. Yo me pegaba mucho a ella, y ella dudaba, pero paso poco para que pegaramos nuesrtras caderas y las agitaramos al mismo ritmo. Yo ya estaba super caliente y muy erecto, y termine besandole el cuello.

Rapido, fuimos a su alcoba y de un tirón arranque la pequeña blusita que usaba en esa ocasión, y así hice mios esos tremendos tetones que tranto adoraba, ella me chupo mi enorme verga con su virgen boquita de niña, la empine y me la cogi de a perrito, cuando ya me venía, le dije que viniera, que como era buena niña le iba dar su leche, ya si fue me, me derrame en su tierna carita, después lami mi propio semen y nos unimos en un pronografico beso... que cogida