Gratificante

Como tantas otras veces aquel sábado fuimos a una discoteca.
Somos bailones y nos gustan los saraos y el cachondeo.
Nos recreamos viendo a otras parejas y simulamos ser novios todavía , aunque sólo sea por los arrimones que nos damos y los lengüetazos.
Alguna vez algún mozo ha pretendido sacarla a bailar a ella pero nunca lo ha hecho.
Se lo he propuesto alguna vez pero no . Me gusta exhibirla y verla guapa.
Pero aquel sábado fui al baño y al regreso ella hablaba con alguien .
La espié y quise saber más de la relación entablada.
Por un momento pensé en presentarme pero me abstuve.
Siempre he sido un poco fisgón de ella , en la ducha , tras la puerta ...
Y aquello que ví me encendió , era cierto lo que veía , la estaba ligando y ella no hacía ascos .
La camelaba con su sonrisa y ella accedía con carantoñas .
Un poco más y pensé que pasaban a la acción , pero no fue así .
Lo desdeñó y llegué yo.
Comentamos ya en casa y le expliqué lo encendido que me había puesto y lamenté que aquello no pude ver el final.
Ella me contó todo y la proposición que le había hecho , ir a un rincón y darse un buen lote.
Se lo reproché porque yo ya estaba cachondo por verlos juntos y a ella disfrutando.
Sacamos punta a nuestra conversación y lo hablamos desnudando nuestras fantasías .
Le conté que no me disgustaría verla en la cama con otro.
Y a ella aquello también le encendía.
Nos pusimos cachondos y aquella noche la poseí largo rato y con otros ojos.
El fin de semana siguiente pactamos entrar cada uno por separado y dejar que surgiera algo para ella.
Se había puesto sexy y llegó el primero .
No le pareció correcto y llegó otro .
Ahí sí entró y se sentaron juntos . Estaban embelesados y aparentemente cachondos.
Las manos se entrelazaron y las bocas se juntaron.
Un intenso beso cuajó y luego vinieron los tocamientos .
Era tan pulpo como yo y ella lo recibía con gusto.
Salieron a la calle ,nuestra apuesta era saber si lo podía llevar aunque sólo fuera al coche y la casualidad hizo que él tuviera uno y además potente y cómodo.
La calle estaba tranquila y los dos retozaron lo que quisieron.
De lejos observaba todo y mi cuerpo se estremecía.
La despojó la parte de arriba y chupó sus tetas .
Mi mente volaba y no sabía qué hacer , parecía un encuentro sexual a tope y aquella fogosidad la tenía a ella loca.
Se sentaron de nuevo y sus manos jugaron un poco más .
Ella no deseó más y salió del coche.
La acompañó un poco y la despedida fue con lengua .
Arrancó y se fue.
Acudí donde ella , me estaba esperando y lo sabía .
Me dijo que era un compañero que le tiraba los tejos en el trabajo y por eso le había aceptado.
De regreso a casa nos dimos un lote en el coche y luego retozamos de nuevo en la cama.
Al amanecer nuestros cuerpos calientes se juntaron de nuevo y buscaron sexo.
Nos miramos con una mirada cómplice y comprendimos que nuestra elección era algo que nos gustaba a ambos.
LO hablamos y realizamos algo que nos sirviera para mantener nuestra sexualidad y nuestra relación más fresca .
Y convinimos en darnos mutua libertad aunque mis deseos eran verla a ella en brazos de otro.
Yo no paraba de estimular mi cerebro con fantasías de terceros con ella y le propuse que tuviera encuentros donde yo estuviera presente pero sin molestar .
En terreno neutral , hoteles y a poder ser en otra ciudad.
Mientras decidíamos la fecha y la persona , ella me empezó a hablar del compañero de trabajo que la tenía loca y le había pedido relación.
La acosaba en pleno trabajo y le enviaba palmaditas en el culo cuando pasaba a su lado.
La seguía hasta el baño y pretendía encerrarse con ella.
Y a ella le apetecía .
Convinimos que tuviera un único encuentro y dejara las cosas claras .
A cambio ella debía contarme la experiencia.
Y así fue .
Quedaron una noche en un hotel y follaron , vaya que sí follaron . Un portento , toda la tarde del sábado para ellos , una cena y revolcón final.
Llegó a las dos de la madrugada.
Venía medio despeinada y me pareció divina , su cuerpo desprendía un halo que me atraía aún más.
Su cara risueña denotaba el placer que había sentido y yo estaba exultante de gozo.
Tenía una hembra estupenda y me satisfacía en mis fantasías.
El compañero fue un asunto zanjado y firmado con todas las de la ley .
Pacto de silencio al fin y al cabo también estaba casado el otro .
Y ahora realizamos nuestras fantasías acudiendo ella a contactar con hombres dispuestos a dejarse ver mientras hacen el amor y mi placer ha aumentado .
Es algo que no podía imaginar , el ,placer que siento es algo distinto.
Ella a su vez también nota otras sensaciones , se desinhibe , se relaja y disfruta .
Hay hombres verdaderos portentos , no se cansan y además gratis.
La cara de satisfacción de ella me llena de alegría y cuando no puedo más me voy al baño y descargo .
Ellos siguen a lo suyo y rematan sin prisa .
Para que no se alargue mucho hemos puesto un tope de tres horas .
Luego alguno se pone pelma y es mejor así.
En la despedida yo nunca le saludo y ella le planta un beso casto .
Y nosotros a la cama , la habitación ya está pagada y hay que aprovecharla.
La beso con fruición y la desnudo de nuevo lentamente porque su lencería negra la hace esbelta y sus tacones la elevan a cimas insospechadas.
Hemos empezado juegos entre nosotros de dominación y a mi me pone .
Ahora después de la despedida del invitado me hace oler su chochín y yo se lo devoro.
está sabroso , jugoso y relamido.
Nunca hace nada si no es con condón.
Sus gritos cuando folla son gemidos de placer intenso y solloza de vez en cuando .
Me mira cuando la miro y me compadece, por eso la quiero.
LLevamos más de seis años así y queremos seguir al menos hasta los 45.
Luego decidiremos qué hacer .