La confesión de mi esposa

Tenía en aquel momento 16 años. Fuimos con mi madre a pasar el fin de semana en casa de unos tios . Daniel era hijo único y tenía un par de años más que yo. Mi tío hizo un asado muy bueno. Almorzamos,y después que mi madre y mis tios levantaron la mesa y ordenaron la cocina,nos pusimos a jugar a las cartas como para bajar la comida. A eso de las tres de la tarde mi tío nos invitó a dar un paseo en su auto por la ciudad. La cuestión es que se fueron ellos y yo con Daniel nos solos quedamos jugando .

Mi primo era bien morocho,de estatura mediana y un poco gordito.Cada véz que iba a su casa o él venía a la mía, cuando quedábamos solos siempre me insinuaba algo y miraba mi culo sin disimulo,pero jamás intentó propasarse. Esta véz no fué la escepción,mientras jugábamos me preguntaba si tenía novio,si me gustaba algún chico. Me decía que yo era muy linda,que tenía un lindo cuerpo etc etc.

Yo soy de estatura mediana,ojos claros y cabello castaño,pero tampoco tengo "el gran cuerpo",lo que pasaba era que Él me veía con otros ojos,me quería comer con la mirada. Ese día fuí vestida con una musculosa algo escotada,jean y zapatillas.

En un momento me levanté para ir al baño,le dije a Daniel que ya volvía. Entré y junté la puerta sin cerrarla porque solo iba a arreglarme un poco.Mientras me miraba al espejo acomodandome mi cabello,imprevistamente veo que mi primo abre la puerta,pasa y la cierra. Sin darme tiempo a nada,se para atrás mío abrazandome con fuerzas por la cintura diciéndome al oído " siempre me calentastes...no aguanto mas..." Yo resistí y logré girar quedando cara a cara pero siempre pegado a el Le dije ,que en cualquier momento regresaban nuestros padres. Lejos de hacerme caso,me silenció con un beso en la boca que yo intenté rechazar en un principio,pero con sus brazos me tenía inmovilizada. Con fuerza pero sin hacerme daño me corrió y me afirmó contra la puerta siempre pegado a mi cuerpo. Tomó mis manos con las suyas para no dejarme mover y volvió a besarme . Yo pensando que ahí se terminaba todo,me dejé besar así salíamos rápido antes que nos encuentren adentro. Pero Daniel tenía otros planes.

Rápidamente me soltó las manos y sin dejar de besarme comenzó a tocarme los pechos por encima de la musculosa.A pesar que íntimamente me estaba exitando ese manoseo,con mis manos intenté sacármelo de encima sin conseguirlo. Él llevaba puesto una bermuda y estaba con el torzo desnudo. Trató de calmarme acariciándome la cara me decía que no me haría daño,que solo quería gozar mi cuerpo. Dicho eso volvió a apoyarme contra la puerta ,me besó con pasión intentando meter su lengua en mi boca sin que yo se lo permitiera. De epronto siento una mano suya apretandome mi vulva por sobre el jean y la otra levantando mi musculosa y sobándome el pezón de uno de mis pechos. A esa altura mis fuerzas por rechazarlo y la exitación que me hiba ganando,me agotaron y terminé cediendo.

Abrí mi boca y acepté su lengua adentro de la mía y yo le correspondía. Eso fué la señal que Daniel estaba esperando. Sin dejar de partirme la boca a besos,me desabrochó el pantalón y metió una mano por debajo acariciandome mi concha por sobre la tanguita que tenía puesta. Eso fué hizo perder todo mi pudor y orgullo de mujer. Siempre parada afirmada contrala puerta,le abrí un poquito más las piernas como para que me toque con más facilidad. Al ver que yo ya estaba muy exitada,mi primo me hizo sentar vestida sobre el inodoro y parandose frente mío sacó su pija y me la puso frente a mi boca y me pidió que se la chupara.

Si bien es cierto hasta ese momento era virgen,yo había tenido un noviecito con quien solo franeleabamos y una vez se la chupé un ratito,nada más.Pero lo que me estaba ofeciendo Daniel no se comparaba con nada.hasta el día de hoy nunca ví una pija tan grande,era el doble que la de mi marido. No muy larga pero sí muy gruesa y negra. Realmente me dió miedo pero era tal la calentura que me dió tener a mi alcance esa enorme y hermos verga que no dudé mucho.

La tomé con una mano sin lograr cubrirla,y abrí al máximo la boca para chuparle la cabecita nada más. Me las arreglé para hacerlo gozar a pesar de mi inexperiencia. Luego de varios minutos de chuparle la cabeza,los huevos y lamerla de arriba abajo, Daniel me pidió que me parara y ayudandome a desvestirme quedamos desnudos los dos. Tiró en el piso un toallón que había colgado y acostandome de espaldas abrí las piernas sin levantarlas .Él se puso encima y apoyó la cabeza de su pija contra mi concha ya toda mojada de la calentura. Le pedí que lo hiciera con cuidado dado que era virgen.

Apurados por el tiempo,Daniel delicadamente presionó su verga y debido a que estaba bien lubricada con mis propios jugos,entró su cabeza haciéndome dar un grito de dolor. Mi primo asustado se quedó inmóvil sin sacarla. Esperamos unos segundos y cuando se me calmó un poco,comencé a mover mis caderas como para que continúe.Él no se hizo esperar y despacio pero sin pausa me la puso a toda y se volvió a quedar quieto.

Yo quise llorar de dolor y estube a punto de pedirle que me la sacara,pero cuando sentí sus huevos contra mis nalgas me invadió una sensación de placer y me solté. Levanté mis piernas por encima de sus hombros y le supliqué que me cogiera. Daniel no podía creer lo que le estaba pidiendo. Se arrodilló levantando más mis piernas y comenzó a bombearme.Parecía un desposeído,mientras me cogía con fuerzas y movimientos rápidos,me decía " que rica que sos..." " que conchita estrecha tenés..." " gracias por entregarme tu virginidad..." Esas palabras me calentaron al máximo y unas movidas más tube como cinco orgasmos en cadena,jamás acabé y gocé tanto una pija como esta vez.

En el preciso momento que mis piernas se aflojaron por los orgasmos que tube,ví que Daniel tensó su cuerpo tirando su cabeza hacia atrás con los ojos cerrados,con un movimiento rápido sacó su pija de mi concha y se arrodilló encima mío y con su pija a la altura de mi cara se pajeaba con furia y con palabras entrecortadas me dijo " te acabooo..." " me sacastes toda la lecheee.." Yo abrí lgrande la boca para tragarme toda su carga. Sentí un primer chorro contra mi mentón que salpicaron mis tetas,un segundo bañó mi cara hasta mis cabellos y un tercero que me lo tragué a todo. Cuando terminó,siempre arrodillado encima mío,me ofreció su pija todavía dura y goteando para que se la chupe,cosa que hice con dedicación y placer hasta sacarle la última gota de leche y dejársela limpita.

Él se vistió rápido y salió del baño antes que llegara alguien. Yo me senté en el inodoro y pude ver caer mis jugos mezclados con sangre,prueba inequívoca de que Daniel me acababa de desvirgar. Quedé exausta,dolorida,con mi concha destrozada,pero con un placer imborrable porque a pesar de lo imprevisto,de una situación no buscada ni querida,mi primo se encargó de hacerme debutar dándome un inmenso placer que imborrable por el resto de mi vida.

Cada vez que me acuerdo de Daniel,me arde la concha imaginando su pija gruesa y negra dentro mío.