Mi primer y unico amor

Aquel verano comenzo como siempre, como toda mi vida desde la infancia, el mismo balneario de siempre, las mismas familias amigas de siempre, todo normal y familiar, la playa espectacular, el calor a pleno del verano..Sin embargo dentro mio sentia algo muy distinto, las hormonas a punto de hacerme estallar, el desarrollo ya a pleno con mis casi 16 años hacian presagiar que no iba a ser un verano mas.

Mi padre, empresario de de 43 años, deportista, tipo piola con mucha calle y muy amigo me habia insistido durante todo el año para que debutara sexualmente. Tenia todo arreglado con dos trolas que me presento varias veces. Eran muy lindas, pendejas estudiantes y escorts vip que me querian devorar literalmente pero una y otra vez la respuesta era la misma: NO.

Mi madre de 36 años, se habia puesto de novia con mi papa a los trece. Toda una vida dedicada a un solo hombre. No era nada celosa y estaba al tanto de la situacion con las chicas y varias veces salio en mi defensa cuando mi viejo se alteraba y no podia entender como no agarraba viaje con las trolas, Ella siempre le decia "Dejalo en paz al chico" y me sacaba del mal momento.. LLego a tanto que una noche de cena familiar se armo un debate sobre mis gustos sexuales. Mi viejo llego a pensar que era gay. Yo me cagaba de risa pero mi vieja se enojaba muchisimo, me defendia a muerte y terminaba dandelo punto final al tema."Vos te pensas que porque no va a cojer con tus putas no le gustan las mujeres? Es mas hombre que vos porque lo va a hacer con quien verdaderamente lo sienta"

Aquel dia de enero era perfecto. Casi 40 grados de calor, cielo celeste intenso, nada de viento y el mar planchado. La playa explotaba de gente pero la mayoria estaba en la costa disfrutando del mar lo que hacia que la zona de carpas estuviera despoblada y en silencio, muy tranquila Solo algunas señoras mayores que jamas se bañaban y algun pequeño, no habia nadie. Me dije para mi "que bueno, nadie que rompa las pelotas" Estaba particularmente huraño y distante. El calor de ese dia sumaba mas grados a mi fuego interno. Mis deseos ya casi irrefrenablesme tenian asi.

Me sorprendio verla en su carpa yal mismo tiempo me agrado muchisimo. Podia observarla tranquilo con tan poca gente, podia dar rienda suelta al deseo que me quemaba vivo y no tener que andar disimulando o escapando de las miradas.

Ese verano estaba mejor que nunca. mas mujer, terriblemente sexy. Y no era por mis hormonas a full. Habia estado observando como todos los hombres la miraban, de todas las edades....