No se resistio mi madre

Un dia mi padre tuvo un accidente cuando se cayo de un andamio mientras pintaba la fachada de un edificio y debido a esto quedo inmóvil , según los doctores de por vida. A partir de ese dia mi vida dio un giro enorme, pues a pesar de que yo ya tenia mi trabajo, jamas había sido responsable de nadie mas, a parte de mi, y todo lo ganado por mi trabajo se iba en fiestas, viajes, ropa, aparatos electrónicos. Pero a partir del accidente, y al estar mi padre imposibilitado y mi madre nunca haber trabajado en nada por mínimo que fuera. Tuve que cargar yo con la responsabilidad del sustento de ellos.
Mi padre es un hombre de 48 años y mi madre una mujer de 43. Respecto a ella que es en quien se basa mi relato, debo decir que es una mujer muy guapa, incluso con mejor cuerpo que algunas de menos de 30, tiene una piernas bien torneadas, unos senos enormes y no caídos, pero lo que a mi realmente me gusta mucho son sus nalgas. Siempre ha sido una mujer dedicada a su familia y a su casa.
Come les dije, las responsabilidades me hicieron su presa, y entre ellas estaba el proveer de alimentos y servicios a mis padres, asi como pagar sus deudas. Por su parte mi madre era la encargada de el cuidado de mi papa y de la casa.
Asi trascurrio todo en ese tenor por unos meses, hasta que un dia algo cambio las cosas, Sali del trabajo mas temprano y al llegar a la casa entre po la entrada de servicio pues llevaba una despensa para la cocina y al pasar por el vestíbulo de servicio, mire hacia la lavandería, la puerta estaba cerrada pero es de cristal, mi madre estaba sentada sobre la lavadora, masturbándose con sus dedos, y con un bóxer mio en la cara, y vistiendo solo una batita bastante cantadora, casi transparente.
Yo me quede viendo unos instantes,, observaba como tenia los ojos cerrados y el cuerpo arqueado hacia atrás, su ritmo comenzó a acelerarse, en ocaciones se llevaba los dedos a la boca y los lamia, en un momento dado sostuvo el bóxer únicamente con la boca, y con la mano que lo hacia anteriormente se saco las tetas y comenzó a apretárselas, jugaba con sus pezones.
Era impresionante ver como el movimiento y vibración de la lavadora le daba un placer extra, luego de unos minutos mas asi, termino, abriendo la boca y soltando el bóxer, su expresión era de autentico placer. En ese momento estaba yo ya muy excitado, y decidi entrar, al verme pasar a la lavandería, mi madre se levanto como resorte, mal se acomodo la bata, dejando de fuera una de sus tetas, y me dijo. “lo siento hio, lo siento”. Y salio corriendo de la lavandería.
Yo me quede allí, aun se podía ver el charco de fluidos que había soltado mi madre, olía riquísimo, levante mi bóxer caído y limpie los jugos de mama, y luego salí de allí.
Anduve por la casa un rato, y luego fui a ver a mi padre, alli se encontraba mama también, ya con ropa de calle, no levantaba la vista, la salude como si no la hubiera visto, para que papa no sospechara nada, me acerque a saludarla de beso en la mejilla, y percibí su aroma a hembra.
Esa noche, mama no salio de la habitación de papa para nada, y los siguientes días me evitaba a toda costa, hasta que a los 3 dias, por la noche, mama regresaba de visitar a mi tia, la cual vive a pocas casas de la mia, y antes de que pudiera huir, la encare.
“mama, necesitamos hablar”
“hijo lo siento pero no puedo” dijo mientras trataba de subirse.
“entonces tendremos nuestra platica en tu habitación junto a mi padre” le dije, poniéndola entre la espada y la pared.
Inmediatamente mi madre me pidió no hacer eso y le indique pasara al comedor.
Mi madre y yo empezamos a cenar y platicar de que tal nos había ido ese dia, hasta que le pregunte.
“ ¿mama, por que hiciste lo de la otra vez?”
Mi madre se puso roja y su cara reflejaba vergüenza y que en poco rompería en llanto, solo balbuceaba.
“lo siento hijo, es solo que ya han pasado muchos meses desde que tu padre esta invalido, y por esa misma causa yo he estado en abstinencia, asi que no resistí mas y desahogue mis ganas, lo siento de verdad, tu has sido tan bueno, que no te merecias esto” me dijo ya con algunas lagrimas de fuera.
En ese instante me levante y me puse detrás de ella, y comencé a hablarle mientras me apoyaba en su espalda.
“mama, de verdad que yo te entiendo, el cuerpo es el cuerpo, y a veces nos pide cosas y su voluntad es mas grande que nuestra razón”
En ese momento yo estaba ya mas que frotando sus espalda y hombros, acariciándoselos.
“asi que también yo te debo una disculpa”
Mi madre miro extrañada.
“ ¿una disculpa? ¿Por qué?” me pregunto muy confusa.
“te debo una disculpa, porque cuando paso lo de mi papa, te dije que yo veria por los dos, y que cuidaría que nada les faltase, y nunca me preocupe y te descuide en ese aspecto.” Le dije mientras con mis manos entraba bajo su vestido y alcanzaban sus senos cubiertos por un sostén que pedia ayuda para mantenerlos allí.
Mi madre en un instante trato de ponerse en pie, pero yo fui mas fuerte y la contuve, logre liberar una de sus tetas, y empeze a jugar con su pezón que no tardo en endurecerse, mi madre me pedia sin mucha convicción que la dejara.
Pero en vez de eso, mi otra mano, fue en busca de su coño y lo encontró.
Tan cálido como pachoncito, hice a un lado su braga y mi dedos recorrieron la rajita con toda calma, mi madre abrió ligeramente las piernas. Sus actos no correspondían a lo que me pedia, casi suplicaba.
Empeze a sentir a mi madre humeda, muy humeda, asi que sin pensarlo me fui delante de ella y la silla, y me hinque, quedando parte de mi bajo la mesa.
Tome sus piernas y las abri, subiendol sus tacones sobre la mesa, cuando trate de sacarle las bragas, me sorprendió gratamente ver como levantaba la pelvis de la silla, para facilitarme las cosas, en el mismo momento en que logre sacarle las bragas, cabeza se metio entre sus piernas y mi lengua se dio un festín
Comencé a lamerle el coño de una manera por demás desesperada, mi madre cerro los ojos y arqueo su cuerpo hacia atrás, con la vista al cielo y apretándose los labios.
“hijo, ¿que haces?, esto no esta bien, ahhh soy tu madre”
“caya madre, caya, solo déjate llevar, pues como te dije, esto es mi obligación, pero mas que obligación, es también mi derecho”
Mi madre, se quedo en silencio y solo salían gemidos de su boca.
Mi lengua la penetraba como verga, y mis dientes mordían su clítoris, mi madre comenzó a hacer movimientos de cadera, señal de placer, restregaba su sexo en mi cara, mientras liberaba su otro seno y con ambas manos los estrujaba desesperadamente, su expresión era de autentico placer.
Yo continúe dándole una buena lamida como nunca se la habían dado, ella no tardo mucho cuando con ambas manos , atrajo mi cara a su vagina y descargo todo sobre mi rostro.
Al despegarme de ahí mi madre tubo un momento de conciencia, bajo las piernas y trato de levantarse diciendo. “Gracias hijo, pero esto no debe ser”.
Cunado trato de ponerse en pie, yo allí hincado, apoye ambas manos en sus muslos y le levante para luego sentarme al filo de la mesa, justo frente a ella.
“No, mdre, no me des las gracias, te dije que cenaras conmigo y yo ya cene, ahora te toca a ti”.
Dicho esto me abri el pantalón, y dejando mi verga erecta de fuera, se la ofreci a mi madre, que de nuevo la lujuria parecía apoderarse de ella, al verla un tanto duditativa, solo basto que ligeramente la acercara a mi con una de mis manos en su nuca, para que de nuevo cayera como una posesa, a engullir mi verga.
Allí estaba mi madre, aquella que me diera vida algún dia, ahora sentada frente a mi mamándome la verga como una puta con las tetas de fuera.
Se veía que mi madre no dominaba el sexo oral, pues a pesar de mamarle, chuparme, y lamerme la verga, no lo hacia con una buena técnica, aunque eso si, con muchas ganas.
Mi madre alternaba, primero se la comia completa, luego la sacaba y solo la lamia, después empezaba a masturbarme con ambas manos, para teminar con una rica chupada a la cabeza de la verga, y posteriormente repetía el procedimiento. Cabe decir que con la mirada bien clavada en mi verga o en mis ojos.
No era el hecho de cómo me la chupaba mi madre, sino que era mi madre la que lo hacia, totalmente sumisa a mis deseos y ¿porque no? A mis depravaciones también, lo que me hacia estar a mil, definitivamente pensé. “esta puta la he de enseñar a mamarme bien”.
Mi madre continuo chupándomela, yo solo jugaba con su cabello, se sentía tan rico. Luego en un acto de desesperación total, mi madre se abalanzo sobre mi verga comiéndosela toda y abrazándome por la cintura con ambos brazos, no se que pretendía, pero la situación me hizo actuar por instinto y con mis dos manos la tome por la nuca y la jale con todas mis fuerzas a mi, su nariz estaba en mi ombligo, de pronto empezó a dar golpes a la mesa y a mi mismo, entendí que se estaba ahogando y la mantuve asi un rato hasta que por fina la solte. Sus ojos estaban vidriosos por las lagrimas, cuando se saco mi verga de su boca, con ella vinieron una gran cantidad de saliva y liquido pre seminal, mi madre solo me veía con cara sumisa, y después de un fuerte rato de tosidas, se volvió a meter mi verga a su boca.
“Ohh madre, que rico me chupas, sigue asi, me voy, me voooy”
Cuando mi madre se dio cuenta que estaba a punto de correrme, se saco mi verga de la boca y a apunto a su pecho, y fue allí, donde mi semen fue a parar.
Yo estaba totalmente satisfecho, pues la dosis de placer y exitacion era totalmente superior a la de otras noches con otras mujeres, pero sabia que esta noche tenia que poseer a mi madre, tenia que hacerla mi mujer, pues su voluntad estaba rota, y no quería correr el riesgo del arrepentimiento.
Asi que me puse en pie y de nuevo junto a ella le meti los dedos por el chocho mientras mi verga se ponía dura de nuevo, estuve masturbándola unos minutos, mi madre de nuevo gemia, ya no se ocultaba nada, y basto con llevarme los dedos a la boca, para que mi verga tomara vida, le indique que se pusiera de pie, y asi lo hizo, dejando caer el vestido que llevaba puesto, luego, lentamente se tomo las bragas mojadas, y las llevo hasta sus tobillos en ese momento la pasión me gano y le di una sonora nalgada, y asi de espaldas a mi se fue acomodando mi verga en ella.
Lentamente se fue sentando, con una de sus manos tomo mi miembro y se lo puso en la entrada de su vagina para irlo introduciendo al tiempo que se sentaba sobre mi, yo la tome de las caderas para ayudar en el movimiento, cuando ya estuve bien adentro de mama, ella comenzó a mover las caderas de un lado para el otro y de arriba para abajo, regalándonos un placer tan sublime, que no puedo describir. En un momento le tome el rostro y se lo gire hacia mi, comencé a a besarla apasionadamente, unos instantes después me correspondió.
Nuestras lenguas eran una sola, nuestras salivas se unian, mientras mi verga exploraba el interior de mama. Mi madre se empezó a mover como posesa, y sus tetas brincaban de sobremanera, asi que con mis dos manos se las tome y empecé a estrujárselas lo que no tardo en provocarle a mi madre el tercer orgasmo de la noche, mojando todas mis piernas y la silla, en ese instante, quería intentar algo, asi que la puse de pie, para luego recostarla en la mesa, con el culo y las piernas al aire, y llevándome sus pies calzados por esos ricos tacones, a los hombros, trate de penetrarle el culo un par de ocaciones, mismas que mama se resistió, pero ya entusiasmado no vi con malos ojos llenarle la vagina de nuevo, asi que en esa posición, era yo el que comandaba el ritmo, asi que empeze a embestirla con furia.
Las cosas que no se había caído del comedor cuando acomode a mi madre, lo hicieron cuando empezó a vibrar la mesa por mis embestidas, se escuchaban mis huevos chocando contra sus nalgas, y sus ricos melones rebotaban, esta ves fue mi propia madre la que los estrujo. Mi madre ya no gemia, sino gritaba como loca, como una autentica puta.
Me lleve su dedo gordo del pie derecho a mi boca y se lo lami con lujuria, lo que le provoco un ultimo orgasmo, “ohhh si, como me hacias falta hijo, como me hacias falta, no puedo mas”, diciendo esto termino, yo por mi parte seguía follandola con furia, “ ¿te gusta? ¿te gusta como te follo? Ahora ya nunca te faltara sexo, aunque debes saber que también tienes que satisfacerme, como mujer, como hembra, incluso como puta, ¿Qué dices te comprometes?” le dije.
Mi madre contesto en medio de jadeos, “siiii, me comprometo, pero no me dejes nunca”.
“ahora eres mia” le dije, mientras le daba con todas mis fuerza, el ultimo empuje.
“ahhhhh, hijo, que rico” me dijo mi madre.
Yo descargue todo mi semen en ella.
Le deje la verga adentro un rato mas, cai sobre ella, mi madre acariciaba mi espalda y me besaba. Mientras nuestras respiraciones se regularizaban.
Me puse en pie una vez que mi verga se había salido sola de ella, y me sente sobre la silla donde había iniciado todo.
Tenia a mi madre frente a mi, recostada boca arriba, con las piernas colgando y en primer plano su vagina inundada. Mi madre se puso en pie, y fue allí cuando el semen comenzó a resbalar por sus muslos
Mi madre s inclino a levantar su vestido y sus bragas, pero en un movimiento rápido, me quede con las bragas, y le dije “no mami, estas me las quedo yo, son mi trofeo”, mi madre solo me sonrio, y se puso el vestido, se acerco a mi y con un beso me dijo “gracias hijo”.
Comenzó a llevar la vajilla usada a la cocina, asi como los utensilios, al terminar, subio las escaleras y minutos después empecé a escuchar agua corriendo.
Durante esa noche sabia que mi vida había dado un giro inesperado y me había encantado, me gustaba ahora tener el rol de macho de la casa, ahora solo faltaba converir a mi madre en mi puta personal.. y poco a poco lo fui logrando.