Una dulce venganza (segunda parte )

Mire mi reloj, y vi que aun quedaba poco menos de una hora para que comenzase mi clase de ingles, con lo que debia darme algo de prisa si queria profundizar algo mas con ella. La seguia mirando, y cada vez la veia mas apetecible. asi de lado, por la abetura de su blusa se le veia un poco del sujetador de encaje que llevaba puesto, y un poco del canalillo de sus apetitosas tetas. Pense que la muy jodida debia ser como el buen vino, que con los años mejora su sabor y su aroma.
Asi como a los 10 minutos, se quito las gafas y las guardo en el maletin.
---- Bueno, esto ya esta. Muchas gracias por tu ayuda.
---- De nada, ha sido un placer.
Ella me sonrio a la vez que yo kle entregaba sus folios ordenados y clasificados, tal y como me habia indicado. Los recogio y tambien los guardo en el maletin, el cual cerro.
"¡EH! Que se marcha...." pense para mis adentros; y eso no podia permitirlo. Pues no sabia si iba a tener otra oportunidad como aquella de estar solo con ella. Asi que me lance al ruedo con todas las consecuencias.
Sin mediar palabra, y rapidamente, la agarre por los hombros en un fuerte abrazo y consegui pegar mis labios a los suyos.
Ella, en medio de su sorpresa, intento rechazarme con sus manos, pero no lo consiguio, y aparto su cara; yo se la agarre y volvi a pegar mi boca a la suya, mientras daba un apagado grito.
---- ¡Pero que te has creido!--- me dijo cuando la solte.
Se puso de pie y me dio una fuerte bofetada.
Yo tambien me puse en pie y se la devolvi. Ella intento darme otra, pero en acto reflejo consegui parar su brazo, y agarrandola de nuevo, la empuje contra la pared y volvi a besar su boca a la vez que ella intentaba zafarse de mi, pero yo era mas fuerte y la tenia bien atrapada.
Su respiracion era agitada y su corazon latia con fuerza. Yo tambien estaba muy nervioso, pues no sabia que consecuencias podria traerme este paso que habia dado; pero ya una vez iniciado habia que concluirlo.
---- Eres un cerdo y un hijo de puta --- me dijo.
Yo sonrei chulescamente, y seguro de mi mismo le dije:
---- Venga, reconoce que esto te esta gustando.
A la vez que ponia una de mis manos sobre sus tetas.
---- ¡Cabron ! ---- exclamo
Y volvimos aforcejear, a la vez que volvia a besarla en los labios. En estas, caimos los dos al suelo quedando yo encima de ella.
---- Dejame ya---- me suplico.
----Ni lo sueñes zorra. No sabes lo mucho que he deseado esto, y la de pajas que me hice por ti.
Ella comenzo a llorar y a suplicarme que no le hiciese nada. Pero yo seguia con lo mio. Comence a lamer sus orejas con la punta de la lengua, la mrdisquearle la barbilla, y a besar suavemente sus la bios, que por un instante me dio la impresion que reaccionaban y contestaban a mi beso. Meti mi lengua en su boca y se la recorri toda por dentro, hasta que la enrede con la suya.
---- Que buena estas jodida. Lo que debe ser metertela y follarte.
---- Dejame ya por favor, no me hagas nada---- me suplico---- Si me sueltas lo olvidamos todo y...
No la deje terminar porque volvi a darle otra hostia en la cara.
---- Ni lo sueñes hija de puta. Vas a pagar todas las hostias que me diste y todo lo que me puteaste de crio.
---- Lo siento ---- me dijo entre sollozos.
---- Ya es tarde para arrepentirse.
Comence a desabrochar los botones de su blusa, y asi pude ver el sujetador de encaje que llevaba puesto y en el que recogia sus ricas tetas. Le baje las copas del mismo y se las deje al aire. Uf, vaya tetitas que tenia la muy jodida; no eran muy grandes, pero estaban bien firmes y con unos ricos pezoncitos con una aureola rosadita muy apetitosa. Comence a masajearselas con mis manos y luego a chuparselas y lamerle suavemente los pezoncitos hasta que se le pusieron duros y comence a succionarselos, metiendo gran parte del seno en mi boca. Mientras le chupaba un pezon, el otro se lo masajeaba y pellizcaba suavemente, a la vez que apretaba mi paquete contra su entrepierna y se lo frotaba para que notase lo dura que se me habia puesto la verga.
La muy puta comenzo a dar pequeños y leves gemidos. Se ve que en el fondo, aquello que le hacia le estaba gustando. Asi, baje una de mis manos, y echandome hacia un lado comence a acariciarle una de sus piernas a levantarle poco a poco la falda. Ella ya no decia nada y se dejaba hacer con la respiracion agitada. Yo seguia subiendo lentamente por su muslo, a la vez que volvia a pegar mi boca a la suya y enredaba mi lengua con la de ella.
Llegue a la entrepierna, y al tacto note que llevaba una braguitas tambien de encaje. Las aparte hacia un lado, y suavemente comence a acariciarle el coño, mientras ella soltaba un nuevo gemido. ¡Uf! vaya chumino que gastaba la muy jodida; todo peludo, con los labios gruesos y bien marcados. Que tacto y que suavidad tenia aquel chichi. Le meti un dedo dentro, y luego otro y otro, y asi hasta tres, a la vez que notaba como comenzaba a humedecerse. Vaya cueva que tenia la muy cabrona. Le saque los dedos, y se lo segui masajeando y acariciando suavemente. Despes volvia meterle mi dedo anular y ya con la vagina bien lubricada comence a aplicarle un ritmico mete y saca a la vez que le lamia de nuevo las tetas y los labios. Ella comenzo a contor nearse y a retorcerse, y a gemir como una perra en celo. Y asi la estuve pajeando hasta que consegui que se corriera y tuviera un par de orgasmos.
Yo ya me sentia dueño de la situacion mientras que ella se dejaba hacer y no ponia resistencia.
Me incorpore y la ayude a levantarse, a la vez que la sentaba sobre la mesa de un pupitre. Cerre la puerta del aula y eche el cerrojo. La tumbe en el pupitre mientras que ella me imploraba que no siguiese, que la dejase ya, me prometia que no iba a contarnada y que lo iba a olvidar todo. Ahogue su voz pegando mi boca a la suya y dandole un buen morreo con la lengua. Acto seguido, le quite la blusa y luego el sujetador y la falda, dejandola solamente con sus preciosas braguitas de encaje. La contemple por un momento, y vaya cuerpo y figura que tenia la muy cabrona. Estaba buena a mas no poder, como para clavarsela y no parar.
Poco a poco comence a bajarle las braguitas, y ante mi vista fue apareciendo la imagen de su maravilloso coño; todo peludo, un mato de vello rubio que lo cubria. Vaya Chumino que tenia la jodida. Por la rajita asomaban sus apetitosos jugos. Me acerque y contemple aquella maravilla con la que tanto habia soñado y a la que tantas pajas habia dedicado. Ahora era como un sueño el tenerlo delante de mi. En estas, comence a acariciar de nuevo sus ricas tetitas y a succionarle sus duritos pezones. Ella ya ni suplicaba ni decia nada, solo gemia y cerraba los ojos, y comenzaba acolaborar en mi faena acariciando mi nuca. La volvi a besar los labios y con mi lengua fui bajando por su torso y acariciandola, que suavidad y que tacto tenia su piel. Y asi la fui recorriendo hasta que llegue a su magnifico y apetitoso coño. Comence a acariciarselo y le abri sus gruesos labios, y ante mi aparecio su precioso clitoris, asi, bien hinchado como un botoncito de placer que pedia a gritos ser trabajado. Comence a lamerselo suavente con la punta de la lengua y a mardisquearselo con la punta de los dientes. Ella no paraba de gemir y contornearse, mientras que yo seguia trabajandole toda la concha, recorriendo con mi lengua todos sus rincones y pliegues, y metiendola en su humedo tunel, pordonde brotaban sus jugos internos, los cuales fui saboreando a placer. Que rico y que apetitoso aroma emanaban, eran la esencia del placer, la esencia de la tan odiada y deseada Señorita Marisa, que habia vuelto a tener otro par de orgasmos. Ya no se cuantos llevaria.
Asi la deje rendida por unos instantes. Luego me incorpore, abri la bragueta de mis vaqueros y libere mi durisima y tiesa verga, que a gritos pedia pasar a la accion con aquella estupenda concha que tenia delante.
Me coloque en posicion, la abri bien de piernas, coloque la punta de mi polla, bien dura y gruesa, en la entrada de su coño; y le dije:
---- Ya te han follado varios profesores. Pues ya es hora de que tambien te folle un alumno. Y ese privilegio es mio.
La agarre de las caderas, y asi, de un golpe, se la meti entera en el interior de su humeda y lubricada vagina. La muy zorra solto un grito ensordecedor, mientras que yo notaba como sus humedas paredes se adherian a mi mastil, inundandolo con sus esencias internas, mientra que tambien notaba como se iba dilatando su vagina con mi vergota dentro.
Comence a deslizarla en el interior de aquel coño de mis sueños. Y ¡Madre mia! Que me estaba follando al puton de la Señórita Marisa, era un sueño de adolescencia hecho realidad. Estaba haciendo mia a aquella tirana que tanto me puteo y amargo en mis dias de niñez, y ahora se lo hacia pagar con mi mejor venganza. Pues me la estaba follando a placer sin su consentimiento. Era como la culminacion a tantas pajas y morbo que habia dedicado a ese chumino delirio de mi deseo, y que ahora era mio y lo estaba disfrutando con todo mi placer.
Ella echo la cabeza hacia atras y con los ojos cerrados y la boca medio abierta, daba pequeños gemidos mientras que sus tetas se movian al ritmo de mis envestidas. ¡Que buena que estaba la cabrona ! ¡Era toda una hembra ! ¡ Que pedazo de coño que tenia la hija de puta ! Y sobre todo, que placer y que maravillosa sensacion el metersela y follarmela.
Mientras me la follaba, comence a masajearle de nuevo las tetas y a pellizcarle sus duros pezones. Y despues, agarrandola de los hombros, la ayude a incorporarse, y se abrazo a mi como una posesa colocando su cabeza en uno de mis hombros, mientras que yo no paraba de darle y darle con mi dura verga en el interior de su estupendo coño. ¡Que maravilla! ¡Que placer! Aquello era el extasis, la culminacion de mis deseos. Y sobre todo, lo que aun me excuitaba mas era ver la cra de puton y de viciosa que ponia la hija de puta.
Yo baje una de mismanos, y con el pulgar comence a presionarle el clitoris para que sintiese aun mas placer, y recordase toda su vida aquella follada que le estaba aplicando. Queria que disfrutase como nunca habia disfrutado. Ella lanzo un profundo y largo gemido, y se a brazo a mi aun con mas fuerza, y comenzo a comerme la boca y a ofrecerme de nuevo su lengua que se enredo con la mia. Ya la tenia totalmente entregada y domada, y ponia toda su colaboracion en el polvo, se ve que lo estaba disfrutando como nunca antes lo habia hecho la muy cabrona. Por fin habia caido en mis garras tan ansiada presa. Por fin era mia la Señorita Marisa.
Ella coloco sus manos en el pupitre y se echo un poco hacia atras, con la cabeza alzada, los ojos cerrados y kla boca medio abierta, con expresion de una autentica zorra, no paraba de gemir y jadear. Mientras que yo, agarrandola por las caderas seguia aplicandole mis envites, deslizando mi vergota en el interior de su entregado coño, mientras que ella tambien se movia a mi ritmo, haciendo que sus tetas bailasen de arriba abajo. Y asi, tras unos instantes, nos llego mutuamente el orgasmo. Notaba como sus jugos inundaban mi polla que se mezclaban con el semen que le iba bombeando en su interior en largos y calidos chorros, que ella recibia con leves gemiditos y abrazandose con fuerza a mis hombros, y poniendo cara de autentica zorra, pego sus morros a los mios. Era increible, me habia follado a pelo a la Señorita Marisa, y me habia corrido en el interior de su concha, y se la habia inundado. ¡La hostia! ¡Era la hostia ! Ni en el mejor de mis sueños habia vidido esta experiencia.
Ella totalmente agotada, seguia abrazada a mi con su cabeza apoyada en mi hombro, y yo acariciando su espalda y besando suavemente su frente. Y con nuestros sexos aun acoplados y todo mojados. Nos miramos y volvimos a comernos mutuamente los morros, mientras que su lengua volvia a buscar a la mia. Menudo putos habia resultado ser esta zorrita, y como me habia hecho disfrutar la muy hija de puta, desde lugo que pago con creces todo lo que me puteo de crio. Y a pesar de todo, se veia que ella tambien habia disfrutado como pocas veces lo habria hecho.
Estuvimos asi durante un rato, hasta que nos separamos. Yo me guarde mi empapada polla, mientras que ella comenzo a vestirse. Yo la ayude a ponerse las prendas, y de vez en cuando nos dabamos un pico en los labios. Segun termino de abrocharse la blusa, sonaba el timbre que indicaba el final de las clases. Y en ese momento comenzaba a oirse actividad en los pasillos. Yo quite el cerrojpo a la puerta y comence a recoger mis cosas, a la vez que ella se puso frente a mi, y desafiante me dijo:
---- Eres un hijo de puta. Sabras que puedo denunciarte por esto.
Yo, seguro de mi mismo, me acerque a ella, le agarre la barbilla, bese de nuevo sus labios, y chulescamente le dije:
---- Si, pero no lo haras. Esto era una deuda que tenias pendiente conmigo. Ademas, reconoce que eres una zorrita y que te ha gustado todo esto que te he hecho.
Ella comenzo a llorar y yo la acogi en mis brazos y tiernamente bese su frente y acaricie su nuca.
---- Es que me ha gustado--- dijo entre sollozos--- Que bien me has follado, y lo que me has hecho disfrutar pedazo cabron.
Y volvimos abesarnos en los labios.
Aquella tarde no hubo clase para mi, ni reunion para ella. Poniendo como excusa que no se encontraba bien, dijo al conserje que se marchaba a su casa y que yo amablemente me habia ofrecido para acompañarla. Y asi, agarrada a mi brazo abandonamos el lugar y fuimos a su casa, donde continuamos con lo nuestro. A partir de entonces, nos hicimos buenos amigos y comenzmos una relaccion que duro varios años donde disfrutamos del sexo y de otras cosas. Pero esa ya es otra historia.

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