Compinchadas con los compis

A lo largo del año el trabajo y la rutina no nos permite muchas alegrías entre nosotros aunque sí alguna licencia perversa.
Dispongo de despacho propio donde hay material para recoger que se utiliza en actividades.
Y suelo estar sola y recibo visitas inesperadas.
Tengo a dos maestros que últimamente vienen a menudo.
Un es tímido y el otro lo es menos . Vamos que es un atrevido , se pone frente a mi y me manosea cuanto puede medio en broma pero me soba . Y yo me dejo .
El otro paradito no se atreve a tanto pero me ha hecho llegar una nota donde me dice que me admira .
Vaya palabra , y además que le gusto mucho y que le gustaría estar a solas un rato conmigo.
No le he contestado pero lo tengo mosqueado.
En la cena consiguió ponerse a mi lado y además nos tocó en esquina . El otro como es un picaflor volaba como un lobo solitario.
Como la posición le era favorable al estar en esquina y no haber nadie al lado , me hablaba bajito y me tomaba la mano .
Me puse nerviosa y entonces tomó la iniciativa siguiente . Ya debía estar muy salido y sus manos las puso encima de mis rodillas y las sobaba.
Mi corta falda y la media asomaba un trozo de muslo y se atrevió a subir hasta allí.
Quiero que sepas que quiero bailar contigo y luego te llevaré a casa en mi coche.
Se estaba preparando y narraba el programa .
Estaba pillada , los dos en una esquina y siendo acosada por un pajarito.
Si mi marido supiera todo esto lo tendría cachondo todo el día.
Pero el pajarito está casado también y juega con ventaja.
Ya me lo dijo una vez , soy mudo y ciego , de mi no saldrá nada . Tranquila , queda entre nosotros .
Y así fue , luego bailamos y se puso tremendo . Notaba su polla en mi vulva continuamente.
Además buscó un rincón oscuro y charlamos de todo y de sexo .
Es muy zalamero y me dice que soy muy guapa y que sueña a veces conmigo.
Sus manos no estuvieron quietas y buscaban con ansiedad mis muslos.
Al salir tomó mi mano y nos encaminamos a su coche.
Una vez dentro me dió las gracias y me plantó un beso en la mejilla . Gracias me dijo .
Tomamos el camino de mi casa y sus manos se apartaban del volante .
En una zona poco iluminada y cercana a mi casa se detuvo.
Se volvió hacia mi y me besó en la boca mientras sus manos buscaban mis bragas .
No le detuve y me dejé llevar . Quería saber hasta donde . En un coche a esta edad es muy difícil, pero
insistía y tocó mi felpudo . Se corrió y pidió perdón .
Límpiate le dije y vamos a casa.
Y la noche acabó ahí .